Las nuevas medidas para autónomos crean suspicacia
Las regulaciones son percibidas como un paso atrás
EFE
Cuba anunció esta semana nuevas regulaciones para el trabajo por cuenta propia, unas medidas con las que el gobierno asegura querer consolidar este creciente sector, pero que algunos cubanos perciben como un paso atrás en la apertura económica de la isla por miedo a perder el control.
Extender las modalidades de trabajo por cuenta propia fue una de las reformas estrella del presidente Raúl Castro para reactivar la maltrecha economía cubana y aligerar de trabajadores el aparato estatal, pero el sector se ha movido a tientas durante años porque su marco legal se ha ido aprobando con cuentagotas.
De las novedades, la más llamativa es que de momento no se otorgarán nuevas licencias para dos de los buques insignia del “cuentapropismo” cubano tanto por número como por ingresos: los restaurantes privados o “paladares” y los alojamientos particulares para turistas.
Los paladares suman unos 2,000, mientras que en la pla- taforma Airbnb se of recen unos 22,000 alquileres, que reportaron a sus propietarios $40 millones de dólares en dos años.
Aunque las licencias ya se habían paralizado temporalmente otras veces, es la i mprecisa colet i l la que acompaña la decisión lo que causa desazón. Las autoridades mantendrán congelados estos permisos “hasta que se haya perfeccionado el sistema”.
“Acostumbrados como estamos a no pedir explicaciones (...), todos quedamos sin comprender esta nueva brida que según dicen ‘de manera temporal’ se le pone a un sector que ha emprendido, como " - tor cubano Nelson Simón en un texto replicado en varios blogs independientes.
“Porque ni siquiera dispone de un marco económico y legal propicio, la aventura de ! _ - tiva y eficiente la pequeña ‘empresa’ de economía doméstica”, agregó.
En un país donde las decisiones acaban lastradas por la burocracia y cualquier cambio tarda años en materializarse, el veloz despegue de los negocios particulares al calor del boom turístico no pasó desapercibido.
Seg ú n c i f r a s of ic i a le s , Cuba tiene 567,982 trabajadores por cuenta propia, el 12% de la fuerza laboral del país y de los que el 32% son jóvenes.
Pero este crecimiento se produjo en un ambiente de { & tenido en un limbo a los negocios particulares hasta muy recientemente.
Tras un largo proceso de debate en los órganos políticos del país, la Asamblea c uba na reconoc ió por f i n este año a la empresa privada, aunque el avance v ino acompañado de una advertencia: no se permitirá la acumulación de riqueza.
Sigue pendiente una ansiada ley de pequeñas y medianas empresas.
Carlos García, fundador de la red para emprendedores Kewelta, ha abogado en la web de la compañía por cambiar el término TCP (trabajadores por cuenta propia) por el de trabajadores privados.
En el último año se han abierto tiendas dirigidas so
alquiler.. bre todo a los paladares y casas de