Sistema de salud en terapia intensiva
B@PedroFrisneda
El sistema de salud pública en Puerto Rico ha estado en crisis por muchos años. La falta de fondos y recursos que ha dejado la deuda que enfrenta el país y la fuga de miles de doctores en la última década lo han llevado casi al colapso. Esto, ahora aunado con los graves daños en la infraestructura hospitalaria y de servicios médicos que causó el paso del devastador huracán María, han dejado la salud de los boricuas en terapia intensiva.
“El problema principal allá es que, como Puerto Rico ya ha estado presentando tantos problemas económicos por la deuda y falta de efectivo, entonces cuando tienes un evento de esta magnitud, hace que la respuesta a la crisis sea mucho más complicada porque no hay esa infraestructura que tanto se necesita”, dijo el doctor José A. Pagán, PhD, profesor y jefe departamental en el Management en el NYU College of Global Public Health.
Según los reportes más recientes de las autoridades locales y de la agencia FEMA, sólo 50 de los casi 70 hospitales de la Isla han abierto sus puertas. Sin embargo, únicamente en 9 sanatorios se ha restablecido la electricidad. Otros están funcionando con generadores y esto, junto a los serios problemas con la distribución de combustible, ha limitado el acceso de muchos puertorriqueños a servicios y tratamientos.
“Uno de los grandes problemas que enfrenta el sistema de salud es que hay muchas personas que tienen enfermedades crónicas, que necesitan y dependen de ciertos medicamentos todos los días para la presión y diabetes, y ahora como el sistema de comunicación en las farmacias no funciona todo es mucho más complejo”, dijo Pagán, originario de la Isla.
“Está el caso de la gente que necesita cuidados intensivos, como los tratamientos de diálisis, que son más complicados. En el caso de la diabetes necesitas tener el nivel de azúcar bajo control y allí el problema no es sólo tener ciertos medicamentos, sino la dieta adecuada y hay gente pasando hambre...”, añade.
En cuanto al “enorme impacto” que ha causado en los hospitales las inundaciones, el experto cree que debería haber una mejor coordinación entre FEMA, la Guardia Nacional y el gobierno local para lidiar con esa situación, sin embargo, reconoce que estas organizaciones no están especializadas en salud pública.l