Las remesas reinan la economía mexicana en 2017
Proceden principalmente de California y Texas. Son estables y van en incremento a niveles históricos como prevé el Banco Mundial este año, que alcanzarán los 30,5000 millones de dólares. Llegan principalmente a Michoacán, Jalisco y Guanajuato pero en general a todo el país. Se usan para alimentos y vestido y cargan con el peso de no poderse convertirse en negocios que saquen de la pobreza a sus receptores.
Así son y así han sido por años las remesas que envían a sus familias los inmigrantes mexicanos de Estados Unidos, según documentó el Anuario Migración y Remesas 2017 que se dio a conocer en días pasados con información recopilada tanto en los dos países, en el Banco Mundial, el Banco de México, el Instituto Nacional e Estadística y Geografía y la Procuraduría Federal del Consumidor.
La novedad está en la cantidad: si se concreta el pronostico del Banco Mundial, el país tendrá el flujo más elevado en su historia y crecerá hasta un 13%, es decir, 27,000 millones de dólares enviados el año pasado con beneficios para 6.5 millones de personas cuyos parientes no han abandonado a pesar de las amenazas de depotación o justamente por ello.
‘Los migrantes están enviando sus ahorros de vuelta a casa en caso de que deban regresar”, indicó el BM en su reporte. “Están buscando un plan B o C por lo que pueda ocurrir”, agregó el analista financiero director del diario El Economista, Luis Miguel González.
En 2016 las remesas a México llegaron a su máximo histórico al alcanzar los 26,970 millones de dólares, lo que representó un crecimiento de 8.8% a tasa anual y el mayor incremento desde 2006. Así, se superó el récord de ingresos logrado en 2007, año en el que se registraron 26,059 millones de dólares.
Casi la mitad de esos dineros provinieron de dos estados: California, que transfirió 7,998 millones de dólares,