Nueva York rechaza exigencias migratorias y las califica de crueles
Un rechazo generalizado hacia las exigencias hechas por el presidente Donald Trump al Congreso a cambio de ayudar a los más de 800,000 jóvenes a quienes les quitó la protección de DACA, fue el común denominador entre líderes y activistas de la Gran Manzana.
Voces de todos los flancos criticaron ayer al Presidente, por pretender manipular el apoyo a los Dreamers con medidas anti-inmigrantes que contradicen los principios del país, y en especial por atacar a los menores y a las ciudades santuario como Nueva York, que han dado la pelea para proteger a los indocumentados.
Héctor Figueroa, presidente de la unión sindical 32BJ, calificó las exigencias del primer mandatario como una crueldad hacia los inmigrantes y un acto de traición.
“Proteger a los soñadores (Dreamers) no debe conllevar a tomar a sus padres y a millones de otros inmigrantes como chivos expiatorios y como criminales”, manifestó el líder sindical, quien tiene la esperanza de que sus medidas no tengan eco entre la mayoría en Washington. “No debe significar proveer fondos para expandir las fuerzas armadas para seguir aterrorizando a las comunidades de inmigrantes o pagar para construir su ridículo muro”.
José Calderón, presidente de la Federación Hispana, aseguró que aunque la administración Trump se ha caracterizado por su crueldad, las nuevas solicitudes del mandatario van más allá, pues utiliza a los soñadores como objeto de intercambio.
“Este es un intento calloso y manipulador de mantener a los jóvenes inmigrantes indocumentados como rehenes, a cambio de asegurar algunas de las políticas de inmigración más retrógradas y antiamericanas que este país jamás haya visto”, aseguró el activista, destacando que teme por el futuro de los menores y de que se pretenda atacar a ciudades como Nueva York.
El concejal Rafael Espinal, miembro del Comité de Inmigración del Concejo Municipal, se sumó a las voces de protesta contra el manda- tario, pero agregó que confía en que el Congreso negocie de manera “prudente y sabia” un camino que beneficie a todos los inmigrantes. “Todo lo que Trump describe en la carta al congreso va en contra de nuestras creencias básicas como nación. Esto ilustra aún más la intolerancia de Trump hacia nuestras comunidades de inmigrantes y su voluntad de crear divisiones, construyendo muros y separando familias”, advirtió.
Javier Valdés, codirector de la organización Make the Road New York aseguró por su parte que la carta de Trump muestra de manera clara los “deseos grotescos” de los supremacistas blancos y el Fiscal General, a quien calificó de racista. “Las exigencias que establece no son un comienzo para ningún debate de inmigración razonable. Después de que Trump creara una crisis al actuar para poner fin a las protecciones de DACA para 800.000 jóvenes inmigrantes, la solución sigue siendo clara: aprobrar la ley del DREAM Act,
dijo.. sin un solo dólar más para la máquina de deportación de Trump”,