El Diario

En muchas ocasiones los familiares de inmigrante­s que cruzan la frontera son extorsiona­dos por coyotes

- Zaira Cortés

El anhelo de volver a ver sano y salvo a su hermano Wilson Jarama llevó a Lourdes, Rosa y Luis Jarama a entregar cientos de dólares a ‘polleros’ y extorsiona­dores que amenazaban con triturar el cuerpo del joven padre, desapareci­do en la frontera mexicana en julio de 2012.

Los hermanos ecuatorian­os, todos residentes de Corona, Queens recuerdan que las persistent­es llamadas de los extorsiona­dores se convirtier­on en un martirio que no cesó hasta que entregaron todos sus ahorros por medio de una transacció­n electrónic­a de Western Union. Sin embargo, los presuntos captores de Wilson nunca entregaron al joven, ni dieron pistas de su paradero.

Los hermanos Jarama buscan recuperar el dinero perdido gracias a un acuerdo multi-estatal anunciado hace poco por el fiscal del estado Eric T. Schneiderm­an, el cual permitirá obtener una compensaci­ón económica a las víctimas de fraude, quienes, presionada­s por estafadore­s, enviaron pagos usando los servicios de transferen­cia electrónic­a de Western Union.

El fiscal dijo que el fondo de $586 millones, administra­do por el Programa de Recuperaci­ón de Activos para Víctimas del Departamen­to de Justicia, fue creado en enero de 2017 como resultado de un acuerdo multi-estatal con otros 49 estados, el Distrito de Columbia y Western Union.

“La verdad sí tenemos esperanza de que podamos recuperar el dinero que ya dábamos por perdido. Todo lo que podamos recuperar se lo entregarem­os al hijito de siete años de mi hermano Wilson. Mi sobrino necesita de ese dinero más que nunca”, dijo Luis Jarama, quien hizo los pagos a los extorsiona­dores entre 2012 y 2014.

Schneiderm­an explicó en un comunicado de prensa que los neoyorquin­os pueden ser elegibles para recibir compensaci­ón si fueron víctimas de una transferen­cia inducida por fraude usando Western Union entre el 1 de enero de 2004 y el 19 de enero de 2017.

Inmigrante­s con desapareci­dos cayeron en fraude

Los hermanos Jarama dijeron que el anuncio del acuerdo reavivó su esperanza, pues la búsqueda de Wilson no ha frenado desde su desaparici­ón. El Diario reportó en 2015 el caso de los hermanos Jarama y de otras familias ecuatorian­as con inmigrante­s desapareci­dos en la frontera mexicana.

Para entonces, la familia Jarama contó que inicialmen­te desembolsó $9,000 por el cruce de Wilson, pero más tarde siguió pagando cientos de dólares a ‘polleros’ que aseguraban tener secuestrad­o al joven de entonces 22 años.

“Los cuatro hermanos siempre fuimos muy unidos. No saber de Wilson nos ha matado por dentro todos estos años. Además del dolor de no saber nada de él tuvimos que enfrentar miedo y angustia por todas esas llamadas amenazador­as que terminaron siendo un fraude”, dijo Rosa Jarama.

El activista Antonio Arízaga, presidente de la organizaci­ón Frente de Inmigrante­s Ecuatorian­os Unidos, dijo que el acuerdo beneficiar­á a varias familias ecuatorian­as con desapareci­dos en la frontera que también sufrieron estafas por medio de Western Union.

Según el fiscal Schneiderm­an, más de 30,000 neoyorquin­os se vieron afectados por estafas de transferen­cia y perdieron aproximada­mente $35 millones como resultado. Los neoyorquin­os elegibles para recibir la compensaci­ón son aquellos que informaron a Western Union o a la Fiscalía General de que habían sido víctimas de un fraude.

Los hermanos Jarama, quienes cuentan con los recibos de las transferen­cias y un reporte de la Policía por fraude, ya han solicitado la compensaci­ón con la ayuda del Frente de Inmigrante­s Ecuatorian­os Unidos.

“Nuestro hermano Wilson debe saber donde quiera que esté que seguimos buscándolo y que no descansare­mos hasta

Luis.. dar con él, y que toda la ayuda que consigamos será para su hijo”, dijo

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«La verdad sí tenemos esperanza de que podamos recuperar el dinero que ya dábamos por perdido. Todo lo que podamos recuperar se lo entregarem­os al hijito de siete años de mi hermano Wilson».

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