Aumenta demanda
en 2015, trabajó durante año y medio como babysitter por $12 la hora y estudiaba inglés en La Guardia Community College. A los tres meses de iniciar su curso de inglés vio anuncios del curso para formar asistentes médicos y no lo pensó mucho antes de apuntarse. En junio, esta formación piloto empezó a reclutar a estudiantes entre la población inmigrante y en septiembre empezaron unas clases que llegaron a 41 personas de varias nacionalidades durante un año.
Bolívar completó su formación hace apenas unos meses y explica que la mayoría de las clases eran “en inglés pero había una formación al final del curso en español, francés o mandarín”. Desde el SBS se explica que el énfasis en una formación de personas que ya hablan otro idioma y un currículo adaptado a personas que vienen de otros países tiene como objetivo responder a las demandas de una industria que demanda la capacidad de comunicación en varias lenguas dada la diversidad de orígenes en la población.
La de asistente médico es una profesión cuya demanda continua creciendo y lo hará más con la transición que están haciendo los hospitales a actividades desarrolladas en centros ambulatorios, explican desde el SBS.
El inglés es el reto
Además, con ello se da apoyo a los inmigrantes.
“Todo el material era gratis”, explica Bolívar. Tanto ella como sus compañeros tomaban clases de 6.00 pm a 10.00 pm en La Guardia, de lunes a jueves, e hicieron seis semanas de prácticas durante jornadas laborales completas. “El reto fue hacerlo en inglés”, admite esta mujer que reconoce que la mayor parte del tiempo desde que trabaja como asistente médico habla este idioma que tuvo que estudiar.
El currículo del curso se ha desarrollado con socios que son empleadores y han estado muy comprometidos con una formación que ha permitido que Bolívar y otros estudiantes apenas hayan esperado semanas para recibir una oferta de trabajo. Con el curso acabado hace un mes, 10 de los 41 estudiantes están trabajando y muchos de los que aún no están contratados están en procesos de selección de personal. El SBS está trabajando con los socios médicos para abrir la vía del empleo a tiempo completo en centros de salud, clínicas comunitarias y oficinas de doctores.
“Hago electrocardiogramas, asisto al doctor, saco sangre, recibo a pacientes y estoy a cargo de algunos procedimientos en el laboratorio”, explica Bolívar de su trabajo en Damian Family Services tras asegurar que no tenía experiencia previa en ello. Eso si, la mayor parte de los participantes, como ella, tenían otra formación o al menos el high school terminado.
La ciudad va a volver a programar este curso y se quiere trabajar con otros oficios del sector de salud como el crucial cuidado en el hogar.
Para quienes son como Maryi Bolívar es todo un cambio y un nuevo camino. Con el tiempo, quisiera poder estudiar para ser enfermera registrada, confiesa.l