Arrestos, protestas y mensajes navideños por el Dream Act
El Congreso, bajo control republicano, rechazó incluir la iniciativa en la ley de gastos
Con matracas y silbidos, cerca de 200 activistas Dreamers incursionaron ayer en una cafetería del Senado, paralizando brevemente sus operaciones, mientras otro grupo entregaba mensajes navideños a legisladores republicanos, en una jornada de protestas a favor del Dream Act que provocó 40 arrestos.
Las acciones de protesta, como todas de las últimas dos semanas, han tenido el objetivo de presionar al Congreso a que apruebe el Dream Act dentro de una ley de gastos para evitar el cierre del gobierno pasada la medianoche de mañana, viernes.
Pero los republicanos que controlan el Congreso rechazaron ayer definitivamente la inclusión del Dream Act en una resolución continua, que es una medida temporal con fondos para las operaciones de la burocracia federal hasta el próximo 19 de enero.
Varios senadores demócratas, entre ellos Diane Feinstein y Kirsten Gillibrand, han dicho que votarán en contra de la medida si no incluye una solución permanente para los Dreamers. Se calcula que 122 jóvenes están perdiendo a diario su protección bajo el programa de acción diferida (DACA) de 2012, desde que la Administración anunció su desmantelamiento gradual en septiembre pasado.
Roberto Valadez:
Al mediodía, cerca de 200 activistas Dreamers de grupos como “United We Dream” y “Good Jobs Nation”, enfundados con gorras y camisetas color naranja, entraron a la cafetería principal del edificio “Dirksen” del Senado y comenzaron a gritar consignas como “el pueblo unido, jamás será vencido”, “sin papeles, sin miedo”, “queremos el Dream Act ahora” y “sin odio, sin miedo, los inmigrantes acá son bienvenidos”.
Por un rostro humano
Los activistas exigieron la aprobación del Dream Act antes de fin de año y, para poner un rostro humano a la crisis actual, destacaron el caso de Ana Gómez Ramírez, una Dreamer salvadoreña que trabaja en esa cafetería, sirviendo comida a los senadores que decidirán su futuro, o su posible deportación una vez que venza su permiso.
“Vamos a seguir poniendo presión por el Dream Act, aunque las posibilidades sean escasas, tenemos que seguir presionando. Nada es fácil, pero hay mucho en juego“, explicó Roberto Valadez, un Dreamer mexicano que viajó desde El Paso (Texas).
Decenas de agentes de la policía del Capitolio llegaron listos con megáfono en mano y la advertencia de que desalojaran el lugar, o serían arrestados. Un grupo de 17 activistas permaneció en el piso gritando consignas, provocando el cierre de la cafetería mientras la policía procedía a arrestarlos.
Los 17 arrestados siguieron gritando consignas en inglés y español mientras, al otro lado de una cortina metálica, decenas de empleados del Senado se acercaban a averiguar el incidente.
Varios policías intentaron también intimidar y desalojar a los periodistas que llegaron a cubrir esa noticia en desarrollo, incluyendo de este diario, argumentando que está prohibido el uso de cámaras y videos en el lugar (más en el recuadro).
Otro grupo de activistas se trasladó a las oficinas del líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, del senador republicano, Dean Heller, y otros miembros del Senado, con la misma exigencia. Una activista, no identificada, lloró al recordar que sin DACA, quedará expuesta a la deportación.
Solamente de este grupo de jóvenes Dreamers, cuatro mujeres y diez hombres fueron arrestados.
“Necesitamos la acción de absolutamente todos. Aquí es donde vamos a saber quién realmente está con nosotros y quién no. Ya son muchas las promesas que se nos han hecho que no se han cumplido”, dijo Lucila Campos, una Dreamer mexicana que viajó desde Albuquerque (Nuevo México).
Campos destacó que los Dreamers ya han hecho de todo: se han organizado y movilizado, han realizado numerosas acciones y protestas, sin ningún resultado tangible.
“Ahora es el turno de ellos tomar acción…les hemos dado la respuesta en sus manos, con una legislación que puede proteger a nuestra gente”, afirmó Campos.
Más tarde, otros ocho “DACAmentados” y cinco aliados del grupo “Our Dream”, también fueron arrestados bajo la cúpula del Capitolio.
Les piden actuar como verdaderos cristianos
Horas antes, otros activistas Dreamers de “CASA en Acción”, marcharon desde la iglesia “United Methodist Church” hasta las oficinas del presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, y otros nueve líderes republicanos del Congreso, para entregar una carta con un mensaje navideño y pedirles que, a cuatro días de la Navidad, “actúen como verdaderos cristianos” y apoyen el Dream Act.
Dos de los Dreamers, la salvadoreña Fátima Coreas y el mexicano Eliseo Magos, ambos del estado colindante de Maryland, marcharon vestidos como la virgen María y su esposo José, para representar las posadas, a la espera de un milagro navideño.
Repartieron en cada oficina un volante con una imagen en blanco y negro del peregrinaje de María y José, y un mensaje: “mientras los cristianos se preparan para la llegada de la Navidad, María y José golpean a sus puertas, pidiéndoles que inviten a Jesús con los brazos abiertos”.
“Ustedes pueden invitar a Jesús a que entre, aprobando un Dream Act sin ataduras que impida que jóvenes inmigrantes como nosotros sean expulsados de nuestra nación”, puntualiza el mensaje.
“Sabemos que muchos congresistas se hacen llamar cristianos…queremos que vivan la cristiandad, y que así como Jesús tocó puertas y le dieron la oportunidad de nacer de forma sencilla, queremos que los congresistas nos abran las puertas y nos den la oportunidad de quedarnos en nuestro hogar”, manifestó Coreas.l