Decisión fallida
Como una declaración de guerra contra estados que lideran el movimiento por la legalización de la marihuana, el fiscal general, Jeff Sessions, revirtió ayer una directriz del llamado “memorándum Cole” bajo la Administración Obama, para que ahora los fiscales puedan combatir la venta y uso de la marihuana, incluso en estados como California que la han legalizado.
Sessions explicó que la directriz de 2013 minaba “el imperio de la ley” y era una traba para el cumplimiento de las leyes, y que el memorándum emitido ayer simplemente instruye a los fiscales generales en cada estado a que usen su discreción procesal “para interrumpir a las organizaciones criminales, encarar la creciente crisis de drogas, e impedir los crímenes violentos en todo nuestro país”.
En un memo dirigido a los fiscales federales, Sessions dijo que los “principios” que gobiernan los procesamientos judiciales requieren que éstos sopesen todos los aspectos de un crimen, el efecto disuasorio de un juicio, y el impacto cumulativo de crímenes particulares en la comunidad.
Ahora, los fiscales federales podrán desplegar los recursos judiciales con mayor eficacia para reducir la criminalidad, atajar la crisis de las drogas, y desmantelar a pandillas criminales, precisó Sessions, quien desde siempre se ha opuesto a la legalización de la marihuana, y el año pasado cuestionó su uso medicinal.
Previamente, durante una conferencia telefónica con periodistas, funcionarios del Departamento de Justicia no Líderes demócratas calificaron la decisión como un regreso a la “fallida” guerra contra las drogas, que aumentará los encarcelamientos sin mejorar la seguridad pública. “En vez de perseguir a los carteles de la droga, los crímenes violentos, y los principales narcotraficantes, el fiscal general, Jeff Sessions, está persiguiendo a quienes usan la marihuana con motivos recreacionales. Eso no es ser inteligente (en la lucha contra) el crimen”, se quejó la senadora demócrata por California, Kamala Harris.
aclararon si los fiscales comenzarán a combatir los dispensarios de marihuana, o si el memo solo busca frenar la expansión de esa industria.
Las leyes federales prohíben el cultivo, comercialización, uso y posesión de la marihuana, pero el memorándum de 2013 del subfiscal James Cole, en efecto disminuyó la interferencia del gobierno federal en estados que legalizaron la droga.
Ese memorándum dio luz verde para que los fiscales federales no persiguieran casos judiciales en estados que han legalizado la producción y venta de la marihuana y han establecido un sistema para regular su uso, siempre que no estuviera dirigida a menores.
Según el grupo “NORML”, que aboga por la legalización nacional de la marihuana, ocho estados y el Distrito de Columbia, sede de la capital de EEUU, permiten el estupefaciente para consumo personal. La lista incluye a Alaska, California, Colorado, Maine, Massachusetts, Nevada, Oregon y Washington.l