Trump cambia de estrategia para el plan migratorio
El mandatario busca trabajar con republicanos de la Cámara Baja
El presidente Donald Trump cambió de estrategia tras la derrota de su plan migratorio en el Senado y se ha puesto a trabajar con republicanos de la Cámara Baja para aprobar una ley que reduzca la inmigración legal, financie su muro con México y ofrezca una solución a los “soñadores”.
Trump se recuperó rápido del rechazo que recibió esta
El Presidente
semana su iniciativa en el Senado y puso a su fiscal general, Jeff Sessions, a llamar a filas a los republicanos de la Cámara de Representantes, donde aprobar una ley es más fácil que en el Senado porque se necesita solo una mayoría simple.
En un comunicado publicado anoche, Sessions pidió a los legisladores “trabajar juntos” para aprobar una ley migratoria que incluya los “cuatro pilares” que Trump exige para que cualquier ley reciba el apoyo de la Casa Blanca y, con la firma del presidente, pueda entrar en vigor.
Esos cuatro pilares incluyen dos ideas que resultan aceptables para buena parte de los legisladores moderados de la oposición demócrata: $25,000 millones de dólares para el muro con México, a cambio de una solución para 1.8 millones de indocumentados que llegaron a EEUU de niños, conocidos como “soñadores”.
Son los otros dos pilares los que más ampollas han levantado en el debate migratorio porque buscan reducir los niveles de inmigración legal, y para los demócratas y algunos republicanos moderados, eso supone una violación de los principios fundacionales de EEUU como “país de inmigrantes”.
Esos dos pilares buscan cancelar la lotería de visados para la diversidad, que asigna 50,000 permisos de trabajo y residencia al año; e instaurar una selección por méritos para sustituir al actual sistema de reagrupación familiar, conocido por sus detractores como “migración en cadena”.
La iniciativa en la Cámara de Representantes que reúne todas esas características fue impulsada, entre otros, por los republicanos Bob Goodlatte y Raúl Labrador, de origen puertorriqueño.
Trump ya ha expresado su apoyo a esa propuesta y está presionando a los legisladores republicanos para que voten a su favor en cuanto vuelvan al Congreso, a finales de febrero.
Será más fácil para Trump aprobar una ley en la Cámara Baja porque los republicanos tienen una mayoría muy holgada; el problema será luego conseguir que esa legislación reciba el respaldo del Senado, donde cualquier propuesta necesita el apoyo de varios legisladores demócratas..