Se suicida presunto autor de las explosiones en Texas
El sospechoso activó un explosivo cuando estaba acorralado por la policía
El presunto autor de las cinco bombas que aterrorizaron este mes la ciudad estadounidense de Austin (Texas), que dejaron dos víctimas mortales, murió ayer al hacer detonar uno de estos artefactos que llevaba consigo en su vehículo cuando se encontraba acorralado por la policía.
El jefe del Departamento de Policía de Austin, Brian Manley, aseguró en el lugar de los hechos que el individuo fallecido, un joven blanco de 23 años, era el sospechoso principal de la investigación tras la información obtenida de anteriores ataques por los testigos y vídeos de las cámaras de seguridad.
Varios medios locales identificaron al autor como Mark Anthony Conditt, vecino de la pequeña localidad de Pflugerville, a las afueras de Round Rock, la ciudad al norte del área metropolitana de Austin en la que se produjo el desenlace de este caso.
La Policía no ha confirmado oficialmente esta identidad ni tampoco ha aclarado cuáles habrían sido los motivos que llevaron a Conditt a provocar el caos durante veinte días en la capital texana con la colocación de bombas de manera aparentemente indiscriminada.
“No tenemos ninguna explicación a estos actos, no entendemos qué le podía motivar para hacer esto, pero continuaremos investigando”, añadió Manley.
Los agentes habían acorralado a Conditt la pasada madrugada en el estacionamiento de un hotel cercano a Round Rock, “mientras esperaban la llegada de los equipos especiales para detenerlo con vida”.
“El vehículo empezó a rodar de nuevo y le seguimos para no perderle la pista; sin embargo, se detuvo a un lado de la carretera y cuando los miembros de los SWAT se acercaban, uno de los agentes abrió fuego y el sospechoso accionó el dispositivo bomba que llevaba consigo”, detalló Manley.
A pesar de la confirmación del fallecimiento del principal sospechoso, el jefe policial instó a la gente a que se mantenga alerta porque no se sabe dónde estuvo el sospechoso antes de morir.
“El sospechoso de las bombas de Austin está muerto. ¡Un gran trabajo por parte de las autoridades y todos los interesados!”, escribió en su cuenta de Twitter el presidente Donald Trump.l