Arte “Pintado en México” en el MET
Exhibición en el museo de Nueva York revela el esplendor de los artistas del siglo XVIII
lograr mostrarle al visitante el florecimiento del arte en el entonces virreinato.
“Esta exposición es importante porque es la primera vez que se consolida un conjunto del siglo XVIII completo”, dijo la directora de Fomento Cultural Banamex, Cándida Fernández.
La exposición, compuesta por obras de distintos tamaños, entre ellas varias de grandes dimensiones e impresionantes detalles, estuvo disponible al público en México, llegó luego a Los Ángeles y hace su tercera escala en Nueva York, donde permanecerá hasta el próximo 22 de julio.
“Es una pintura que transita más hacia la dulzura, la luminosidad y con una paleta más clara de colores”, añadió la experta, y destacó que la obra de la segunda mitad del XVIII “es muy dulce, muy luminosa”.
Fernández resaltó la be- lleza de los personajes: “las vírgenes se hacen casi niñas, los ángeles adolescentes y aún hasta Dios Padre tiene canas, pero con una carita realmente sin arrugas”, dijo.
Pero también consideró que esta producción artística es el reflejo de la importancia geopolítica del México de entonces.
Estas pinturas “no salen por inspiración solamente sino que se dan en una Nueva España solvente económicamente, poderosa socialmente, con una gran fuerza basada en su mestizaje y con una economía que era el eje de la economía entre Oriente y Occidente, con el comercio que venía del Oriente y con una fortaleza en su producción de plata impresionante”, relató Fernández.
Fue en el siglo XVIII cuando en la Nueva España y ante la demanda de obras de tamaño natural destinadas a espacios religiosos como sacristías y coros e incluso espacios universitarios que se consolidó esta creación así como nuevas escuelas de arte.
Paula Mues Orts, integrante del equipo de curadores de la exposición, explicó que la intención de este proyecto, que supuso seis años de investigación, era “mostrar una cara diferente totalmente a lo que era esta idea de que la pintura era decadente o demasiado dulce e introducir una manera nueva de entenderla”.l