PATRULLA FRONTERIZA FUERA DEL CONTROL
La Patrulla Fronteriza es una de las fuerzas policiales preferidas del presidente Donald Trump. La agencia representa el fraude y los excesos de la política migratoria de esta administración.
La administración asegura que las agresiones en contra de los agentes fronterizos aumentaron 73% para justificar un nivel de peligrosidad que urge la construcción de un muro. Se reportó que en 2017 hubo 786 ataques, a pesar que la cantidad de detenciones fueron mucho menores. O sea menos gente cruzó la frontera.
En realidad la cantidad de incidentes no aumentaron, sino que la Patrulla cambió la manera de contar. En un caso en que siete agentes fueron atacados por seis inmigrantes con una botella de agua, un rama de un árbol y una piedra fueron contados como 126 incidentes en vez de uno, tal como era antes. Se multiplicó siete agentes por seis agresores y tres elementos, según un análisis del ACLU.
La muerte del patrullero te Rogelio Martínez ocurrida el año pasado fue declarada un accidente por el FBI. Trump tuiteó que fue “brutalmente golpeado” y el sindicato de patrulleros dijo que fue una emboscada de indocumentados.
La labor del patrullero es peligrosa, pero menos que la de otros departamentos de policía. Una análisis comparativo muestra que uno de cada 7,968 patrulleros murieron por año entre 2003 y 2017, en comparación a uno por cada 3,924 puedan morir en otras agencias policiales.
Es necesario mantener una imagen de alta peligrosidad para solicitar un aumento de 5,000 agentes para que haya más de 26,300 en el 2020. El problema es que hoy ya hay una vacante de 1,900 agentes.
Una gran cantidad de los postulantes para la patrulla fallan a la prueba del detector de mentiras. A tal punto que el Congreso para eximir algunos de la prueba. Esto significa regresar a un pasado plagado de agentes acusados de crímenes comunes y violaciones a los derechos civiles.
Los abusos contra las personas de los malos agentes ya costaron más de 60 millones de dólares. En un periodo de 12 años se pagaron en total 177 millones incluyendo temas laborales y de propiedad.
Un análisis del Instituto Cato sugiere congelar las contrataciones de la Patrulla Fronteriza, en vez de aumentar como quiere la Casa Blanca.
El estudio reveló que la Patrulla tiene el mayor índice de despidos de personal por mala conducta o bajo rendimiento, en comparación al resto de las agencias policiales. Dice que la falta de supervisión es culpable de ello. No es casualidad que esta agencia es la que tiene la menor cantidad de personal para investigaciones internas.
La Patrulla Fronteriza es la que está fuera de control, no la frontera.