Mezcla de coca con fentanyl pone en riesgo a neoyorquinos
√@PedroFrisneda
El Departamento de Salud de la ciudad de Nueva York (DOHMH) lanzó ayer una nueva campaña para informar y alertar a los neoyorquinos residentes en Lower East Side, de Manhattan, sobre los peligros del fármaco fentanyl —o fentanilo como se le conoce en español— un opioide sintético, extremadamente potente, que ha inundado rápidamente el mercado de drogas ilícitas en las calles de la Gran Manaza.
El fentanyl es 50 a 100 veces más fuerte que la heroína y la morfina y esto aumenta el chance de morir por sobredosis, porque reduce el tiempo para reaccionar —o revivir a la persona— entre el momento en que se consume la droga y el momento en que comienzan los efectos adversos en el cuerpo.
Lo más preocupante, según informaron las autoridades de Salud neoyorquinas, es que mucha gente que consume la droga no saben que lo están haciendo debido a que la misma viene mezclada con otras substancias como la cocaína. Esto ha creado una crisis de salud pública sin precedentes por el número de sobredosis letales que está dejando a su paso.
Por esta razón, el programa piloto lanzado por el DOHMH en el Lower East Side, o Loisaida como lo conocen los hispanos de origen puertorriqueño, busca informar a las personas que ocasionalmente consumen cocaína que podrían estar en riesgo de sufrir una sobredosis por opioides.
Para diseminar su mensaje de alerta, empleados del DOHMH visitarán bares y clubes nocturnos en Loisaida y ofrecerá posavasos y carteles para informar a clientes de esos locales que la cocaína que algunos consumen podría estar mezclada con fentanyl.
Según datos del DOHMH, en 2016 el fentanyl estuvo presente en el 37% de las muertes por sobredosis asociadas con el consumo de cocaína, un aumento del 11% en comparación a 2015.
Esto sugiere, según un comunicado del DOHMH, que algunas personas que sufrieron una sobredosis no mortal por consumo de cocaína y fentanyl podrían no haber tenido la intención de consumir opioides.
Aunque el fentanyl sólo se puede conseguir con prescripción médica, el mismo es falsificado, contrabandeado y distribuido por laboratorios clandestinos en forma de narcótico a base de opioides sintéticos. Su adicción ha aumentado en Nueva York y todo EEUU y su consumo puede ser mortal si se usa indebidamente.l