Mujeres y nuevos rostros copan las candidaturas demócratas en primarias
La tendencia indica una clara renovación del partido
Un mayor número de mujeres y nuevos rostros coparon las victorias demócratas en las primarias celebradas en cuatro estados sureños de EEUU de cara a las elecciones legislativas del próximo noviembre, donde también se elegirán decenas de gobernadores estatales.
Los votantes demócratas en los estados de Texas, Kentucky, Arkansas y Georgia dejaron a un lado su apoyo a políticos con carreras más dilatadas, y se decantaron por más mujeres, candidatos de color y veteranos de guerra, un nuevo impulso con el que pretenden recuperar el control de la Cámara de Representantes.
En Kentucky, los demócratas escogieron a Amy McGrath, la primera mujer de la Armada que pilotó un avión de combate F-18 en batalla, para que dispute un escaño clave en la Cámara de Representantes, ganando al candidato favorito del partido para la carrera.
En Texas, los demócratas nominaron a dos candidatas lesbianas con antecedentes militares o policiales, una latina y otra filipina; mientras que en Georgia le dieron la oportunidad a la exlíder de la minoría en la Cámara Baja estatal Stacey Abrams para tratar de convertirse en la primera gobernadora negra en el país.
La exsheriff latina Lupe Valdez será quien se enfrente al republicano Greg Abbott para arrebatarle la Gobernación de Texas, una mujer hispana, homosexual, veterana del Ejército y liberal.
La tendencia de los demócratas indica la demanda de sus votantes por una renovación del partido, impulsado por los votantes jóvenes y con diversidad racial, una querencia que quedó difusa en las elecciones presidenciales de 2016, con la derrota de Hillary Clinton en las presidencias.
Los votantes de las primarias demócratas buscan candidatos que encarnen un cambio real de la política, también en reacción a la elección de Donald Trump como presidente del país.
No obstante, estos giros también conllevan cierto riesgo para los demócratas, ya que ponen en manos poco expertas la posibilidad de arrebatar o no alguna de las dos cámaras del Congreso a los republicanos, así como alguna de las gobernaciones que ostentan.
La dinámica de los demócratas es muy distinta a la e los republicanos, donde las primarias se han discernido entre aquellos que apoyan al presidente Trump y los más conservadores.