¿Quienes se verán más afectados?
Según múltiples expertos legales, muchas personas con solicitudes justas de asilo no podrán cumplir los nuevos y severos estándares impuestos por Sessions, quien ahora requerirá que estos no solamente prueben que su vida corre peligro por ser perseguidos, sino en el caso de delitos “privados” como la violencia doméstica, deben mostrar que el gobierno es esencialmente “cómplice” del acto.
Las víctimas de violencia doméstica y de violencia pandilleril, los perseguidos por su religión y por cualquier ente privado -no gubernamental- tendrán mucho más difícil calificar al asilo en Estados Unidos, a menos que puedan probar que el gobierno de su país no sólo no los protegió sino que fue “patrocinador” de esos actos.