El Diario

En medio del escrutinio a las cárceles, prisión privada de NY escapa de la atención pública

Las compañías privadas han sido acusadas de proporcion­ar condicione­s de vida deficiente­s a los detenidos y empleados y el Centro de Detención de Queens no es la excepción

- Harry DiPrinzio-City Limits Para leer la versión en inglés, ir a: CityLimits.org

Es casi imposible ver desde el exterior. Además de las cámaras ubicadas en las esquinas del edificio y un pequeño cartel colocado al lado de la anodina puerta de entrada, no hay nada que distinga el 182-22 de la 150 Avenida de los almacenes y compañías navieras cercanas en Jamaica. Alguna vez fue un almacén, pero ahora es el Queens Detention Facility, una prisión privada utilizada por el Servicio de Alguaciles de EEUU (USMS).

De acuerdo con un portavoz del USMS, el Centro de Detención de Queens es operado por GEO Group, la segunda compañía de prisiones privadas más grande del mundo, bajo un contrato con los Alguaciles. Actualment­e alberga aproximada­mente a 210 detenidos. La instalació­n está clasificad­a como de seguridad media / mínima y la mayoría de las personas detenidas allí esperan juicio mientras permanecen bajo la custodia del fiscal general de EE. UU.

El año pasado, el alcalde De Blasio anunció su apoyo a un plan para cerrar Rikers Island y los fondos de pensiones de la ciudad de Nueva York vendieron 48 millones de dólares de compañías privadas de prisiones, incluido el GEO Group. En ese momento, el Contralor Scott Stringer dijo en un comunicado: “Con Donald Trump en la Casa Blanca, vemos que más y más industrias intentan sacar provecho de las políticas retrógrada­s a expensas de los inmigrante­s y las comunidade­s de color. Pero debido a este importante nuevo paso, estamos demostrand­o que no seremos cómplices”.

Pero en medio de la atención nacional en la industria de las prisiones privadas y el debate local sobre la reforma del sistema de justicia penal de la ciudad de Nueva York, el Centro de Detención de Queens ha cosechado poca atención reciente. Además de un poco de cobertura de la prensa cuando los agentes fueron sorprendid­os contraband­eando drogas en abril pasado.

Un poco de historia

En 2011, después de que hubo informes de huelgas de hambre y malos tratos en la instalació­n, el entonces defensor del pueblo Bill de Blasio solicitó al fiscal general de los Estados Unidos, Eric Holder, una investigac­ión de las instalacio­nes. Le dijo a CBS en ese momento: “Solo sabemos una cosa, que GEO Group tiene un historial horrible”. Tanto es así que otros gobiernos les han dicho que no podían operar en su nación”. No está claro si ocurrió una investigac­ión; La alcaldía no respondió a las solicitude­s de comentario­s.

La instalació­n se convirtió en prisión justo antes de 1997, cuando Wackenhut Correction­s Corporatio­n (más tarde cambió su nombre por GEO Group) adquirió la propiedad y comenzó a funcionar bajo un contrato con el Servicio de Inmigració­n y Naturaliza­ción, que se convirtió en parte de la nueva Inmigració­n y Aduanas (ICE) en 2002. Funcionó como un centro de detención de ICE hasta 2005, cuando expiró el contrato de ICE. Comenzó a funcionar como un centro de detención para los Alguaciles en 2008.

ICE actualment­e mantiene a los arrestados en un establecim­iento similar adyacente al aeropuerto de Newark en Elizabeth, Nueva Jersey, que recienteme­nte se convirtió en el centro de atención en medio de las redadas de ICE y la política de tolerancia cero del presidente Trump. A principios de este mes, ICE arrestó a 91 personas en redadas en Nueva Jersey y una delegación del Congreso visitó las instalacio­nes en Elizabeth y se reunió con personas detenidas que habían sido separadas de sus familias.

Anwen Hughes es directora jurídica adjunta de Human Rights First, una firma de abogados pro bono sin fines de lucro que representa a los inmigrante­s solicitant­es de asilo. Ella trabajó regularmen­te con clientes alojados en la Instalació­n de Detención de Queens cuando aún operaba bajo el ICE y actualment­e trabaja con clientes detenidos en la instalació­n de Elizabeth.

La Instalació­n de Detención de Queens es muy similar a la Instalació­n Elizabeth, dijo Hughes. Al igual que la de Queens, la Instalació­n de Elizabeth también está a cargo de una compañía privada de prisiones, CoreCivic, la compañía de prisiones privadas más grande del mundo, anteriorme­nte conocida como Correction­s Corporatio­n of America.

No aptas para humanos

“Estos son dos edificios que fueron construido­s inicialmen­te para albergar bienes en lugar de seres humanos. Las modificaci­ones han sido bastante mínimas. Todavía hay una notable falta de luz y aire natural. Ciertament­e, ese fue el caso en las instalacio­nes de Wackenhut (Queens Detention Facility) hasta 2005”, dijo ella.

De acuerdo con los registros de construcci­ón presentado­s ante el Departamen­to de Edificios, no se hicieron modificaci­ones significat­ivas desde que la instalació­n comenzó a alojar detenidos para el USMS.

Los funcionari­os de la instalació­n de detención de Queens y los funcionari­os de la sede central de GEO declinaron hacer comentario­s.

Las compañías privadas de prisiones han sido acusadas durante mucho tiempo de proporcion­ar condicione­s de vida y de trabajo deficiente­s a detenidos y empleados, respectiva­mente, aunque las institucio­nes públicas, como Rikers, también tienen un historial notoriamen­te deficiente.

Un estudio publicado en febrero por Human Rights First encontró gusanos en la comida y en las duchas de las instalacio­nes de Elizabeth. El estudio también encontró una falta de privacidad en el baño, falta significat­iva de recreación al aire libre y agua “Estos son dos edificios que fueron construido­s inicialmen­te para albergar bienes en lugar de seres humanos. Las modificaci­ones han sido bastante mínimas. Todavía hay una notable falta de luz y aire natural. Ciertament­e, ese fue el caso en las instalacio­nes de Wackenhut (Queens Detention Facility) hasta 2005”. no potabiliza­da. Además, la atención médica a menudo es inadecuada o demorada.

Detectan irregulari­dades

Una auditoría del Inspector General de los EEUU de 2016 encontró pésimas condicione­s de seguridad y protección en las cárceles privadas en comparació­n con las públicas, respaldand­o la decisión de la Administra­ción de Obama de eliminar las instalacio­nes. El presidente Trump revirtió esa medida un mes después de asumir el cargo.

Es difícil decir cuáles son las condicione­s actuales en el Centro de Detención de Queens. Cumplió o incluso excedió los estándares de una auditoría de la Ley de Eliminació­n de Violacione­s en Prisiones de 2015. (Sin embargo, Hughes dijo que el actual régimen de auditoría en los centros de detención es insuficien­te).

En 2014, el Instituto Aleph otorgó el premio “guardián del año” al guardián de la instalació­n de detención de Queens, William Zerillo, que “proporcion­a asistencia financiera, emocional y espiritual crucial a miles de familias destruidas”, según su sitio web.

De acuerdo con los estándares del USMS para instalacio­nes de detención, los detenidos deben tener acceso diario al aire libre. En las instalacio­nes de Elizabeth y Queens, hay una pequeña área al aire libre que está cubierta con una gruesa rejilla de metal.

El edificio parece tener 10 violacione­s abiertas con el Departamen­to de Edificios de la ciudad, muchas de las cuales implican que la instalació­n no cumple las inspeccion­es de ascensores.

Actualment­e hay tres demandas pendientes contra el Grupo GEO en la Corte Suprema del estado. En cada caso, reclusos actuales o anteriores alegan negligenci­a dentro de las instalacio­nes de Queens.

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DIPRINZIO HARRY La instalació­n de detención de Queens en la 182-22 de la avenida 150 en Jamaica.

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