Presentan lista de exigencias en reunión con titular de DHS
Activistas piden el fin de la política de ‘tolerancia cero’
Activistas proinmigrantes exigieron a la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, un cese de la política de “tolerancia cero” en la frontera sur contra los inmigrantes, en la primera reunión de su tipo desde que ésta asumió el cargo en diciembre de 2017.
Según el “American Immigration Council” (AIC), Nielsen recibió a líderes de cuatro organizaciones proinmigrantes y defensoras de los derechos humanos, en lo que supone es la primera vez que la secretaria del Departamento de Seguridad Na- cional (DHS) los recibe en su despacho.
Los activistas llegaron al encuentro con la idea de dialogar sobre la crisis humanitaria en la frontera sur, el impacto de la política de “tolerancia cero” contra los inmigrantes indocumentados, y el futuro de los niños que han sido separados de sus padres.
Pero Nielsen, al parecer, no quiso hablar del plan para reunificar a las familias lo más pronto posible, según AIC.
Los activistas presentaron una lista de exigencias a Nielsen, entre éstas un fin a la política de “tolerancia cero” y a la separación de familias; un cese al procesamiento judicial de solicitantes de asilo; la inmediata reunificación de familias que fueron separadas, incluso antes de abril pasado.
También pidieron la identificación de todos los padres bajo custodia de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), que se les explique sus derechos y se agilice su reunificación con sus hijos, aún si ya fueron deportados o puestos en libertad.
Exigieron que la Administración Trump abandone sus planes de expandir los centros de detención de familias, incluso en bases militares o en “campamentos” transformados en áreas de reclusión.
También pidieron que los detenidos tengan acceso a abogados en todas las instalaciones de ICE; que las autoridades cesen la práctica de devolver a solicitantes de asilo a condiciones de inseguridad en el lado mexicano de la frontera sur y que se respete el derecho que tienen los refugiados, bajo las leyes de EEUU y convenios internacionales, a solicitar protección en suelo estadounidense.
Los activistas instaron a que se incremente las ayudas para reducir la violencia y la persecución en los países del “Triángulo del Norte” –Guatemala, El Salvador y Honduras-, en vez de recortarla.
“El DHS está atacando a las familias y criminalizando a solicitantes de asilo, pero la secretaria (Nielsen) no parece querer hablar de ello. La respuesta de la Administración a familias que buscan protección en EEUU es cruel y a veces ilegal, y priva a los solicitantes de asilo de una oportunidad justa para presentar sus reclamos”, resumió Beth Warlin, directora ejecutiva de American Immigration Council.
Michelle Brané, de la Women´s Refugee Commission, dijo que la Administración está violando los derechos humanos “intencionalmente” y el caos y daño duradero a las familias demuestra ”una cruel violación de las leyes, incompetencia extrema, o ambas cosas”.l