El Congreso no lo aplaude
Mientras tanto, líderes demócratas y republicanos en ambas cámaras del Congreso, especialmente en estados agrícolas que Trump ganó en 2016, han aconsejado cautela en el manejo de la disputa actual. El senador republicano por Utah, Orrin G. Hatch, por ejemplo, dijo que si bien China ha tomado ventajas comerciales, Estados Unidos debe tener una estrategia eficaz para responder a sus tácticas, pero no con medidas que ponen en riesgo “la salud y prosperidad de la economía estadounidense a largo plazo”. La frustración de los políticos es tal que ayer mismo, arriesgando la ira de Trump, los líderes del Senado rompieron una regla no escrita de no criticar al presidente en sus giras internacionales y aprobaron por abrumadora mayoría una resolución que lo obliga a pedir el permiso del Congreso para asuntos comerciales.