Un hogar a prueba de niños
Recomendaciones de la guía de seguridad de SafeHome para proteger a los menores contra accidentes
De acuerdo con las estadísticas, cada año, más de 3.4 millones de niños experimentan una lesión no intencional en su casa y 2,300 en edades menores a los 15 años mueren a causa de éstas.
El ahogamiento es la principal causa de las lesiones y muertes no intencionales en los menores de 1 a 4 años, ya que los menores pueden ahogarse en apenas 2 pulgadas de ésta.
La asfixia, las caídas, el envenenamiento o intoxicaciones, los incidentes con armas de fuego y las quemaduras están también en la lista de las principales causas de los accidentes en el hogar. En el rubro de las quemaduras cabe destacar que es más probable que los más pequeños las sufran con líquidos calientes o vapor, mientras que los más grandes al entrar en contacto directo con el fuego.
Prevención, Prevención
Ante tales cifras —que son más que prevenibles—, la organización SafeHome recuerda durante esta temporada vacacional (cuando los niños pasan más tiempo en la casa), algunas medidas de seguridad que con constancia deben seguirse para tener un hogar a prueba de niños las 24 horas del día: Mantener el orificio del triturador de alimentos con la tapa de protección para prevenir que los más chicos introduzcan en ella sus manos. de las escaleras (de tenerlas) las puertas de seguridad diseñadas para éstas.
Cerciorarse que todos los cordones de persianas y cortinas queden fuera del alcance de los niños y que sean del estilo separado. Este tipo de cordón previenen los incidentes de asfixia o estrangulación accidental.
Co●ocar en todas las puntas de las mesas los topes de seguridad que amortiguan y evitan que los menores sufran heridas al caer o chocar contra los bordes puntiagudos o duros.
Insta●ar en la puerta principal y en las que dan acceso al patio o el jardín la cadena o la chapa de seguridad, a una altura que el menor no la alcance, para evitar que abra la puerta.
Co●ocar las cubiertas de seguridad en todos los toma corrientes.
Ubicar los sillones y sofás retirados de las ventanas. Así se previene que los niños lleguen a caer al vacío desde una ventana abierta.
Co●ocar los topes que bloquean el cierre total de las puertas para evitar que los dedos de los menores queden atrapados o aplastados al cerrarse estas por completo.
Mantener los secadores y tenazas para el cabello desconectados y guardados en sus cajones correspondientes cuando no se están usando.
Si el menor es demasiado curioso o inquieto y mueve las manillas de graduación del agua cuando se le está bañando, conviene instalar en los grifos del agua el dispositivo de prevención de quemaduras. De esta manera la temperatura del agua siempre estará controlada.
cu●tar todos los cables de impresoras, computadoras, lámparas y televisores, así como de las extensiones de conexión eléctrica. Asegurar los libreros a la pared y colocar los libros más pesados en los estantes bajos para prevenir que se les caigan encima a los menores que tratar de alcanzarlos por curiosidad. Mantener todos los artículos de oficina (grapadora, tijeras, bolígrafos, tijeras, etc.) guardados en un cajón del escritorio que tenga un seguro para niños.