Gana título y aún así pide disculpas
El salvadoreño Acosta es rey de los 400 metros
Abrazado con su madre, quien llora de emoción luego de ver ganar a su hijo la medalla de oro y batir el récord de los 400 metros libres en Juegos Centroamericanos, el nadador salvadoreño Marcelo Acosta siente que la vida le dio una revancha cuatro años después de haber perdido, por muy poco, la misma prueba.
Su registro de 3 minutos, 50 segundos y 61 centésimas, con el cual se impuso al mexicano Ricardo Vargas y al venezolano Rafael Dávila, le dio la noche del lunes ese oro que le fue esquivo en 2014.
Acosta se ha ganado a pulso el rótulo de mejor nadador de su país y es la mejor carta de la nación centroamericana para Tokio 2020.
“A él hace cuatro años en esta misma prueba se le escapó la medalla de oro, precisamente con un colombiano, pero hoy Dios y la vida le han permitido ganarla y darle a El Salvador la primera medalla de oro en estos juegos”, dijo Lidia Ester Jiménez, madre de Marcelo y quien lo acompaña a todas las competencias.
En los Juegos de Veracruz 2014 la destacada actuación del colombiano Mateo Angulo, que impuso récord, le impidió a Acosta mantener una racha de triunfos.
Lidia recuerda que su hijo comenzó a practicar la natación a los seis años viendo a sus hermanos mayores, quie- nes también se dedicaban a este deporte, pero se dedicó por completo a las piletas unos años después cuando comenzó a hacerlo de manera competitiva.
A los 12 años ya había impuesto su primer récord nacional en El Salvador en la prueba de 1,500 metros.
Hoy con 22 años, Acosta estudia administración deportiva en Estados Unidos y tiene en la mira un objetivo mayor: los Olímpicos de 2020.
“Quiero pedir disculpas a mi país porque no pude hacer mi mejor papel en los 1,500, sé que esperaban una mejor participación, pero ahí no se pudo. Sin embargo, ahora ganamos
Acosta.. y le dimos esa satisfacción a los salvadoreños”, declaró