Yatziri Tovar
Nosotros no podemos votar, pero hemos estado involucrados en la política porque es algo que hemos tenido que aprender tras historias de vida”, dice la “soñadora”.
Catalina Cruz, quien es la cabeza de ese grupo en Queens, asegura que la vinculación de los “dreamers” a su labor política ha sido fundamental para demostrar que “un pedazo de papel” no es lo que define el poder de la gente. Incluso en el proceso de recolección de firmas creó una estrategia para que salieran a las calles un “soñador” junto a un votante demócrata registrado para empoderar a los jóvenes.
“Ellos son el reflejo exacto de lo que yo era y por ello me siento más responsable de poder llegar a Albany y no defraudarlos...”, comenta la candidata.
La mexicana Yatziri Tovar, otra de las “soñadoras” que vive en Queens, y quien se ha convertido en activista comunitaria, asegura que la razón por la que cada vez hay más jóvenes “dacamentados” vinculados a la política es por el impacto que las decisiones legislativas tienen sobre ellos.
“Nosotros no podemos votar, pero hemos estado involucrados en la política porque es algo que hemos tenido que aprender. Se trata de un asunto de nuestras vidas”, comentó la joven. “Nuestro reto es organizar a nuestra comunidad y unir a la gente que está luchando a nuestro lado, porque no podemos votar pero tenemos poder”.
Javier Valdés, codirector ejecutivo de la organización Make the Road New York, asegura que la actual retórica anti-inmigrante de la Administración Trump ha alimentado el deseo de más “soñadores” de participar activamente en política.
“Los Dreamers son una gran parte de nuestra comunidad. Aunque ellos no tengan el privilegio de votar, saben cuál es el poder del voto y por eso urgen a sus familiares, amigos, y comunidad a que salgan a votar”, dijo el activista. “Ha habido un incremento en el interés de ellos en la política, ya que ellos saben la importancia de votar por personas que representan y entienden las necesidades de nuestra comunidad”.l