Mandatario mintió
conocida como “Stormy Daniels”, y a Karen McDougal, una exmodelo de Playboy, que alegaban presuntos amoríos con su cliente hace una década.
El “propósito principal era influir en la elección” dijo Cohen, quien negoció el acuerdo para obtener una sentencia carcelaria menos severa.
Cohen confesó que arregló pagos por $130,000 a Daniels y $150,000 a McDougal a través de la empresa American Media Inc. (AMI), dueña de la revista “National Enquirer”, para no publicar la historia de su relación extramarital con Trump pocos meses después del nacimiento de su hijo, Barron, con su tercera esposa, Melania.
Según documentos judiciales, en 2017 la Organización Trump posteriormente reembolsó $420,000 a Cohen –incluyendo una bonificación y otros gastos- como “gastos legales”, usando facturas falsas para ocultar la verdadera naturaleza de los pagos.
Trump y su nuevo abogado personal, Rudy Giuliani, han intentado desacreditar a Cohen, calificándolo de mentiroso. A Trump, en particular, le ha dolido la aparente traición de Cohen, tomando en cuenta que éste alguna vez juró que “tomaría una bala” por él.
Durante una entrevista difundida ayer por la cadena televisiva, Fox Las discrepancias entre las declaraciones bajo juramento de Cohen y las de Trump, sólo dejan al descubierto que el mandatario mintió cuando dijo que no sabía de los pagos, según expertos legales. News, Trump trató de minimizar su relación con Cohen al afirmar que sólo le trabajó a medio tiempo, y sugirió que éste mintió para reducir sus problemas legales. Trump afirmó que “debería ser ilegal” que presuntos criminales colaboren con la fiscalía.
No hubo “crímenes”
Trump también intentó una nueva estrategia al señalar que los pagos que hizo Cohen no constituyeron “crímenes”.
Cohen “logró un gran acuerdo. Estaba implicado en otro negocio sin ninguna relación conmigo en el que creo hubo fraude”, afirmó Trump, sugiriendo que Cohen admitió violaciones a las leyes de financiación electoral porque los otros delitos que cometió eran más graves.
“Muchos abogados en televisión y abogados que tengo dicen que no fueron crímenes. El (Cohen) logra un mejor acuerdo cuando me utiliza”, se quejó Trump.
“Esos dos cargos ni siquiera son un crimen. No fueron financiación de campaña”, insistió Trump al precisar que los pagos provinieron de su bolsillo.
Durante múltiples ocasiones anteriores, Trump había dicho que no estaba al tanto de los pagos pero ahora asegura que se enteró de éstos “mucho después”.
También la campaña presidencial de Barack Obama de 2008 cometió una “masiva violación” a las leyes de financiación electoral, pero “como tenía un fiscal general distinto, lo trataron de forma muy distinta”, argumentó Trump.
“Así es que Obama la tuvo, otra gente también. Casi todo el mundo que se postula a un cargo tiene violaciones de (financiación de) campaña”, subrayó Trump, sin ofrecer ejemplos.
En 2008, la campaña de Obama pagó una multa de $375,000 por incumplir el requisito de la Comisión Federal Electoral (FEC) de registrar en un plazo de 48 horas unas 1,300 donaciones por alrededor de dos millones de dólares pero, según expertos, no hubo crimen porque el incumplimiento de plazos no fue intencional.l