Una vida intensa
John McCain fue un senador conservador que representó al estado de Arizona desde 1987 hasta su muerte. No fue un personaje con una ideología rígida; su agenda se movió de acuerdo con los caprichos de su base política. En general mantuvo una línea conservadora, pero también se inclinó hacia la izquierda en contadas ocasiones.
Eso sí, nadie puede cuestionar el patriotismo de McCain. En la guerra de Vietnam (1955-1975), su avión de caza, un Douglas A-4E Skyhawk, fue derribado por un misil norvietnamita en octubre de 1968 y pasó a ser prisionero de guerra.
Fueron más de cinco años de tortura. Los militares vietnamitas insistieron a McCain y a otros prisioneros de guerra que grabaran pasajes de propaganda antiestadounidense. Al final, después de mucho sufrimiento, todos cedieron; cada uno, incluyendo McCain, se prestó a tales grabaciones.
A su regreso a Estados Unidos, después de ser liberado en marzo de 1973, McCain volvió a la Fuerza Naval. Las cosas no fueron como antes; no solamente estuvo inconforme con la vida militar, sino que la relación con su familia, específicamente con su esposa, se desmoronó. Dejó la naval, se separó de su primera esposa y luego se mudó a Arizona en abril de 1981.
Inmediatamente después de asentarse en Arizona, McCain buscó la vida política. Ganó una curul en la Cámara de Representantes en las elecciones de 1982, aunque no fue una faena fácil. Su campaña fue empañada con acusaciones de oportunista Eso sí, nadie puede cuestionar el patriotismo de McCain... Fue el único senador que insultó públicamente a Donald Trump. (carpetbagger) por sus opositores.
Unos años más tarde buscó un puesto en el Senado, siendo elegido en las elecciones de 1986 para reemplazar a uno de los íconos conservadores más importantes del país: Barry Goldwater.
Su vida en el Senado es más conocida. McCain buscó reivindicar los ideales conservadores de su base política y trató de aislarse de las voces extremistas de su estado. Algunas veces lo logró, pero también sucumbió miserablemente.
En 1983, se opuso al proyecto político que elevó el nombre de Martin Luther King Jr. como día festivo federal; años después reconoció su error. En un momento estuvo a favor de una política integral migratoria, pero también estuvo en contra. En su última reelección se notó la presión de los racistas en su campaña política y se unió a los antiinmigrantes.
Finalmente, McCain fue el único senador que insultó públicamente a Donald Trump. A la conferencia de Trump y Putin en Helsinki, que se llevó a cabo en julio de este año, McCain llamó “una de las conferencias más vergonzosas que cualquier presidente de Estados Unidos había sostenido”. Este comentario cierra con luces la vida de John McCain.