LAS AMENAZAS DE DONALD TRUMP
Las múltiples declaraciones y tuits de ayer por parte de Donald Trump contra la caravana de miles de inmigrantes provenientes de Honduras son parte de la campaña electoral para las elecciones que culminarán el próximo 6 de noviembre.
Una vez más, Trump echa por la borda cualquier intento de reconciliación nacional e insiste en dividir al país y azuzar a lo que él llama su base en torno a temas que causen su encono y rabia, con el fin de que salgan a las urnas y voten según la voluntad del presidente.
Pero incluso la excusa de las elecciones e incluso tomando en cuenta el carácter volátil de Trump, y finalmente sabiendo que miente con la misma facilidad con la que habla, la nueva andanada de insultos, acusaciones e incitaciones es peligrosa, humillante, y subleva.
Con una habilidad pasmosa para la manipulación, Trump inició ayer una violenta escalada en la retórica migratoria.
Primero, amenazó en Twitter a México con un posible enfrentamiento armado: “tengo que pedirle a México, de la manera más fuerte, que detenga este embate, y si no puede hacerlo llamaré a las Fuerzas Armadas para cerrar nuestra frontera sur!”
Esta bravuconada lleva a temer que esté preparando una política agresiva contra el próximo presidente mexicano, López Obrador.
Luego, lo definió claramente como una parte importante de su estrategia electoral: “Los republicanos tienen que hacer de las horrendas, débiles y anticuadas leyes migratorias, y la frontera, una parte de las elecciones de Medio Término”.
En tercer lugar, siguió su tendencia a demonizar a la oposición al punto de llamar a los Demócratas traidores que conspiran con países extranjeros para invadir nuestro país. El partido Demócrata, dijo, “quiere fronteras abiertas y leyes débiles”, y lidera el “asalto contra nuestro país por parte de Guatemala, Honduras y El Salvador” por permitir entrar a gente, “incluyendo a muchos criminales”. Y en otra oración: “¡Todo es la culpa de los demócratas!”
Todo ello, definió, es para él “mucho más importante”… que el nuevo acuerdo de libre comercio entre EEUU, México y Canadá.
Mientras tanto, el primer grupo de miembros de la caravana ha cruzado Guatemala y se encuentra en la frontera con México. Contrariamente a las acusaciones de Trump no son criminales y a las del presidente hondureño, no son títeres de una maniobra política, sino familias que huyen de la violencia y la miseria y buscan un lugar donde puedan trabajar y criar a sus hijos.
Es necesario repudiar en los términos más claros el comportamiento irresponsable del Presidente y señalar los peligros que estas acusaciones puede causar.
Porque si faltando 18 días para los comicios, usa esta retórica de incitación, ¿qué pasará el día de las elecciones?•