Sandra Guzmán
La mexicana Sandra Guzmán tiene claro que el próximo 6 de noviembre deberá cumplir con su deber democrático y ejercer su derecho al voto en la jornada electoral, pero también tiene una tarea especial ese día. Junto a decenas de padres de la escuela pública 321 de Park Slope, en Brooklyn, y su hijita de 7 años, quien cursa tercer grado, promoverán una venta comunitaria de golosinas, a la que han denominado ‘321 Election Day Bake Sale’.
Más allá de crear un ambiente de unidad, el objetivo del evento, que irá desde las 8 a.m. hasta las 9 p.m., es recaudar fondos que serán donados a la organización Immigrant Families Together, que trabaja por reunificar a familias separadas por las políticas de la Administración Trump. De igual manera la comunidad educativa de ese plantel está enviando un mensaje claro contra el odio y el ataque a los inmigrantes.
“Este evento lo estamos promoviendo por todo lo que está pasando en la política, porque entendemos que es importante enseñarles a nuestros niños que no se trata solo de educarse, sino de ayudar a los demás, de ser verdaderos seres humanos y ayudar a las familias separadas por los ataques del Gobierno Trump”, comentó la madre mexicana, quien el lunes en la noche preparará junto a su única hija una docena de churros fritos con azúcar, y pan de muerto, típico de la cultura de su país, para vender en la jornada.
“Creo que la venta tiene un sentido más profundo, y que nosotros que tenemos la suerte de tener tanto en esta comunidad, debemos compartir”, agrega la madre de familia, quien trabaja con un banco y además ayuda a la organización Immigrant Families Together.
La mexicana agrega que en momentos en que el presidente Trump planea despojar de la ciudadanía a los hijos de inmigrantes indocumentados, que como ella nacieron en suelo americano, siente mucho dolor y “no se vale quedarse de brazos cruzados”.
“Me da tristeza ver todo lo que estamos viviendo y siento mucho coraje y preocupación por todos los niños que están aquí con sus papás “Debemos levantar nuestras voces y educar a los niños para que no produzcamos el mismo tipo de gente que es Trump, esa es la meta” buscando un porvenir mejor. Por eso debemos levantar nuestras voces y educar a los niños para que no produzcamos el mismo tipo de gente que es Trump, esa es la meta”, agregó la mexicana, quien a través de la organización con la que hace trabajo voluntario, ayuda a familias afectadas.
Defienden las buenas causas
Nancy Cruz también es otra de las madres latinas que participará en la venta comunitaria y destaca que la escuela PS321, donde estudian unos 1,500 menores, siempre se ha destacado por apoyar buenas causas y defiende el respeto a todos por igual.
“Las familias estamos trayendo comida para vender y hemos decidido donar todos los ingresos de este evento que surjan de lo que nos compren los que vayan a votar. Dios quiera sea una fila grande”, dijo la puertorriqueña, quien tiene tres niños y quien advierte que en ese centro educativo es prioridad hablar de lo que ocurre en el país.
“Aquí tenemos un programa en la escuela que se llama ‘no hay lugar para el odio’ y los niños están hablando sobre eso, tenemos club de lectura y les enseñan que la gente que viene de diferentes partes son nuestros hermanos y que hay que apoyarlos en medio de sus dificultades”, comentó la madre, quien preparará brownies para la venta.
Y aunque no tienen una meta específica del dinero que esperan recaudar, las madres recordaron que en el evento anterior de elecciones, reunieron unos $3,000, cifra bastante útil para las organizaciones que ayudan a la comunidad.
Bonnie Kerker, otra de las madres que participará en el evento, y que ha trabajado de cerca con familias de inmigrantes, advierte que ya que en el verano un tema doloroso fue la separación de familias, decidieron tomar esa causa para ayudar.
“El dolor y el sufrimiento de las familias no se ha desvanecido. Vivimos una vida tan privilegiada, en gran parte debido a la suerte de dónde y cuándo nacimos, que tenemos la responsabilidad de ayudar a otros y de enseñar a nuestros hijos a usar su privilegio para ayudar a hacer del mundo un lugar más justo y mejor”, dijo la madre de familia. “He trabajado con algunas de las familias a las que este dinero ayudará, y he visto cuánto puede significar un abrigo, útiles escolares, una comida o una tarjeta de
diariamente”.. metro para una familia con dificultades que es satanizada