Macri, de acuerdo con juego en Madrid
La designación del Estadio Santiago Bernabeu de Madrid como sede para la final de la Copa Libertadores entre Boca Juniors y River Plate el 9 de diciembre generó malestar y resignación en Argentina.
La determinación del presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, de mudar la segunda final del máximo torneo americano a la capital española generó controversias y diversas reacciones.
En primer lugar River Plate presentó la noche del jueves su apelación a la sanción de la Unidad Disciplinaria de Conmebol, que le aplicó una multa económica de 400,000 dólares, dos partidos oficiales sin público en 2019 y el cambio de sede para el encuentro.
Asimismo, Boca Juniors también apeló a la Unidad Disciplinaria que no dio a lugar a su petición de descalificación a River y argumenta que esta segunda final no debe disputarse.
Por ese motivo, el club xeneize también notificó un comunicado donde avisa que se presentará ante el Tribunal de Apelaciones de Conmebol, y eventualmente luego al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).
Asimismo, los medios argentinos expresaron su malestar por este cambio de sede a una ciudad que está fuera de la jurisdicción de Conmebol.
“No nos sacaron la final de la Copa, la regalamos (y con moño)” señala una editorial del diario La Nación que argumenta que se llegó a este punto “por incapacidad organizativa, por no combatir a los barras como es debido, por querer sacar ventaja de todo y a cualquier precio”.
Por su parte Olé sentenció: “Llegamos a este punto por incapacidades organizativas propias y el River-Boca en Madrid es la ratificación de una situación anómala”.
Asimismo, todavía queda por resolver qué sucederá con aquellos simpatizantes de River Plate que compraron la entrada para la segunda final en el Estadio Monumental.
¿Cómo y cuándo se les reintegrará el dinero y si tendrán prioridad para adquirir una entrada para el encuentro en Madrid? Son algunas de las preguntas que genera esta mudanza de continente para la definición del torneo de clubes más importante de América. El presidente de Argentina, Mauricio Macri, transmitió el viernes al jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez, que está de acuerdo con la celebración en Madrid de la final de la Copa Libertadores de fútbol, aunque resaltó que se trata de una decisión que corresponde exclusivamente al mundo del fútbol. Sánchez y Macri mantuvieron una reunión con motivo de la presencia de ambos en la cumbre del G20 que se celebra en la capital argentina. Sánchez y Macri han comentado ante la disputa de ese partido, la numerosa presencia de argentinos en España.