Familias de detenidos por Inmigración gastan $24,000 dólares
Costos incluyen sueldos no devengados, pérdida de bienes y abogados
La detención de una persona por razones migratorias en Estados Unidos le cuesta a su familia una cifra promedio superior a los $24,000 dólares, incluyendo sueldos no devengados, la pérdida de bienes materiales y la contratación de un abogado.
Esto de acuerdo a un nuevo estudio dado a conocer este miércoles por investigadores del Instituto Binacional de Migración de la Universidad de Arizona y titulado “La red de captura de inmigrantes y el saqueo de recursos económicos de familias, hogares y comunidades en Estados Unidos”.
El informe señala que en este tipo de casos los costos económicos se empiezan a acumular rápidamente para las familias afectadas.
Y hay costos directos, como los recursos económicos que se utilizan para pagar por ejemplo una fianza y los servicios de un abogado de inmigración, e indirectos, que serían la pérdida del salario que recibía el migrante y cualquier oportunidad de ganar dinero mientras dura su detención.
Geoffrey Boyce, investigador del programa de estudios de la frontera del Instituto Binacional de Migración, y uno de los autores de la investigación, explicó en conferencia de prensa que, en promedio, los costos directos por familia son de unos $9,228 dólares y los indirectos ascienden a $14,956.
Estas cifras están basadas en entrevistas hechas entre enero del 2017 y junio del 2018 en Arizona a 125 familias en las que al menos uno de sus miembros había sufrido un arresto por razones migratorias después de vivir un año o más en Estados Unidos.
El estudio resalta que el 80 % de las familias estaban integradas tanto por inmigrantes sin estatus migratorio como por ciudadanos estadounidenses y residentes legales en el país.
El ingreso promedio anual familiar de los participantes fue de $22,500 dólares, lo que, de acuerdo al estudio, demuestra que un arresto por razones migratorias supone perder lo que estas unidades reciben a lo largo de doce meses de trabajo.
A estas complicaciones hay que sumar que el 47% de las familias entrevistadas aseguró haber vivido más de un arresto migratorio en los últimos años.
Y que los costos del arresto son asumidos únicamente por la familia, por lo que para afrontarlos se ven obligados a liquidar parte de su patrimonio, ya sea monetario o material.
En los casos más dramáticos, el 9.5 % de los encuestados reportó haber perdido su hogar o haber recibido una orden de desalojo.
Estas situaciones también tienen un alto costo para los menores de edad, pues el 34% de las familias indicó que se redujo el desempeño educativo y su capacidad de obtener un título de los estudiantes.
Una detención de este tipo provoca además que empeoren las enfermedades crónicas que sufren determinados miembros de la familia o se vean incapaces de acceder al tratamiento médico necesario.
Otros impactos a la familia incluyen la separación familiar a largo plazo, el divorcio y la perdida de custodia de un hijo o hija, apunta el reporte.l