¿Qué hacer con tantos dulces?
Consejos para administrar los caramelos de Halloween
Puede ser divertido hacer reír a otros automovilistas, pero es una mala idea conducir mientras usas cualquier cosa que pueda impedir tu visión como máscaras o gafas chistosas. Colócalos en la cajuela o en un espacio de almacenamiento conveniente para evitar que se deslicen mientras conduces hasta que llegues a tu destino.
Después de Halloween muy probablemente tendrás la nevera llena de dulces producto del “trick-or-treat” de tus hijos.
Como sabemos, a menos que los niños tengan alguna condición de salud, el consumo ocasional de golosinas no es un problema, pero el aumento durante esta época puede conllevar una serie de situaciones que debemos tomar en cuenta por su bienestar.
Aumento de peso, hiperactividad y caries son solo tres asuntos a los que se debe prestar atención cuando hay acceso fácil a este tipo de alimentos.
Entonces, ¿cómo los administramos para que no coman tanto azúcar? A continuación, compartimos varios consejos para que después de Halloween no vivan días de espanto:
Recuerda que los dulces nunca deben sustituir una comida saludable.
Pon●e límites: que solo coma una o dos piezas por día.
Si la cantidad de dulces es demasiada, consideren regalar algunos. Igualmente, aprovecha para enseñarle a compartir.
Para deshacerte rápido de toda esa cantidad de dulces puedes invitar a sus amigos a la casa para una tarde de juegos. Así podrás repartir entre más niños todos esos caramelos que parecen no acabarse.
Cuando te pida una de las golosinas que ganó, acompáñala con una merienda saludable (nueces, pasas, etc.)
Asegúrate que se cepillen los dientes luego de comer el dulce y que mantengan una disciplina de higiene bucal más estricta de lo usual.
En la medida de lo posible, que coma los dulces con las comidas o poco después de comer, así la producción de saliva aumenta y esto ayuda a contrarrestar los ácidos producidos por las bacterias que hay en la boca y lava las partículas de comida.
Picar entre comidas puede aumentar el riesgo de caries y el problema es doble si lo que están comiendo son dulces.
Evita que coman caramelos duros u otros dulces que se mantienen en la boca mucho tiempo. El tiempo que la comida azucarada permanece en tu boca tiene un papel importante en el desarrollo de la caries.
Procura que no coman golosinas pegajosas, pues se adhieren a los dientes y mientras más pegajosas son más tiempo tarda la saliva en lavarlas de la boca, aumentando el riesgo de caries.
Si le vas a permitir comer sus dulces, restringe las bebidas azucaradas como las saborizadas o sodas. Procura mejor que beban agua.O
El Departamento de Asuntos al Consumidor advirtió en un comunicado, como anticipo a la celebración de Halloween, de la necesidad de adecuar disfraces a la edad de los menores para evitar accidentes. “La edad de cada niño determina el disfraz y los accesorios que puede utilizar. Queremos prevenir accidentes y, sobre todo, que nuestros niños y los más grandes estén seguros”, indicó la institución.
Es importante que los consumidores lean las etiquetas de los artículos antes que adquirirlos y que se aseguren del rango de edad y las instrucciones de uso de cada artículo.
“El rol de los padres durante la selección de disfraces debe ser riguroso y buscando siempre el bienestar de los menores. Deben prestar atención a los accesorios que pueden desprenderse y ser ingeridos por los niños. Deben revisar todo producto que conlleve cordones, cintas o capuchas de los disfraces que puedan provocar asfixia”, señala el comunicado. Asimismo, las pelucas, caretas o maquillaje para completar los vestuarios o disfraces de sus personajes favoritos deben ser usados según para la edad que indique el artículo./EFE