LA CUESTIONABLE DEFENSA DE TRUMP
Aunque el equipo legal elegido por Trump para defenderlo en el juicio político que enfrenta en el Senado se caracteriza por su alto perfil y su experiencia para manejarse ante las cámaras de televisión, la estrategia que seguirá presenta serias deficiencias y contradicciones.
Dentro del equipo figura Alan Dershowitz, profesor emérito de Harvard, quien sostiene que los demócratas han incurrido en una perversión política al acusar a Trump de haber condicionado la ayuda militar a Ucrania a cambio de investigar a Joe Biden.
Dershowitz ha señalado que basará su estrategia en el polémico argumento de que el presidente no abusó de su poder ni obstruyó al Congreso y que, aun en el caso de que así hubiera sido, ninguna de esas ofensas amerita que sea enjuiciado y destituido.
Los expertos consideran “absurdo” este último argumento porque, de aceptarse, significaría que el presidente está por encima de la ley, es decir, que es un dictador. Además, con este argumento Dershowitz se contradice a sí mismo, puesto que durante el juicio contra Bill Clinton declaró que un presidente podía ser destituido, aun sin haber cometido delito alguno.
Dershowitz no solo enfrenta críticas por su estrategia legal sino por su trayectoria. Se le cuestiona por haber defendido a hombres sumamente poderosos, acusados de haber cometido graves delitos contra las mujeres como O.J. Simpson, Mike Tyson, Harvey Weinstein y el fallecido Jeffrey Epstein.
Lo más grave es que el propio
Sondeo Una encuesta de CNN revela que el 51% de los estadounidenses cree que el Senado debe enjuiciar y remover a Trump de la presidencia. Solo el 45% está en contra de ello.
Dershowitz enfrenta una demanda legal entablada por Virginia Giuffre, una de las acusadoras de Epstein. La mujer asegura que el abogado era parte del círculo de tráfico sexual creado por Epstein y que incluso éste la obligó a tener relaciones con Dershowitz, cuando ella era menor de edad. Aunque el profesor ha negado estas acusaciones, su credibilidad está en tela de juicio.
Otra figura controversial en el equipo legal de Trump es Kenneth Starr, quien fue el consejero independiente que encabezó la investigación para destituir a Bill Clinton. La inclusión de Starr pondrá de relieve las contradicciones entre los argumentos que presentó en el juicio político contra Clinton y los que esgrimirá ahora para defender a Trump. En el caso del expresidente, Starr abogó por la presentación de testigos, algo que ahora el equipo de Trump desea evitar.
Tanto el presidente como sus abogados confían en que saldrán airosos porque tienen de su lado al Senado, de mayoría republicana. El panorama, sin embargo, se les ha complicado debido a las recientes revelaciones de Lev Parnas, asociado del abogado Rudy Giuliani, quien asegura que Trump dirigió toda la operación para presionar a Ucrania.•