Caucus de Nevada: ¿Por qué es tan importante?
El estado es uno de los primeros en elegir candidatos
El juego, la fiesta desbordada y el área 51 copan sin lugar a dudas el imaginario popular sobre Nevada a nivel internacional. Para los estadounidenses, el “estado plateado” tiene una faceta adicional que lo sitúa en el epicentro político cada cuatro años.
¿Por qué es tan importante Nevada en la política de EEUU?
El estado es uno de los primeros en elegir candidatos. Tras Iowa y New Hampshire, Nevada es el tercer estado en el que el Partido Demócrata celebra primarias o “caucus” para elegir al que será su candidato presidencial. En el caso del Partido Republicano, es el cuarto, solo unos días después de Carolina del Sur.
Como en Iowa y New Hampshire, ser de los primeros estados en que los electores expresan su opinión da a Nevada una proyección mediática enorme y supuestamente una gran capacidad de influencia sobre el proceso de primarias.
Sabedores de este hecho, los aspirantes presidenciales se gastan gigantescas cantidades de dinero en promocionarse en el estado y proy tagonizan numerosos actos de campaña.
Considerando que Iowa tiene 90.6% de blancos; New Hampshire, 93.9% de blancos y Nevada, 27.8% de latinos, en su mayoría de origen mexicano, este estado es la primera prueba de fuego para ver cómo acoge la comunidad latina a los candidatos.
Nevada es importante en febrero, pero lo es todavía más en noviembre. El epicentro del juego es uno de los llamados estados bisagra, que pueden caer tanto del lado demócrata como del republicano en las elecciones generales.
Si bien en los últimos tres comicios presidenciales los nevadenses apoyaron a Hillary Clinton, en 2016, Barack Obama, en las dos ocasiones anteriores, previamente dieron su apoyo al republicano George W. Bush también en dos ocasiones, y anteriormente lo habían hecho con Bill Clinton (demócrata), George H. W. Bush y Ronald Reagan (republicanos).
Así, los seis votos electorales que Nevada aporta en la elección presidencial son un objeto codiciado por las campañas de ambos partidos, lo que hace que sus visitas al estado se multipliquen a medida que se acerca noviembre.
Nevada, con la única salvedad de Donald Trump en las primarias republicanas de 2016, siempre tiende a elegir a los candidatos que representan la opción más moderada. Por ejemplo, los nevadenses eligieron a Mitt Romney como candidato republicano las dos veces que se presentó en 2008 y 2012; eligieron a Hillary Clinton en 2016 frente a Bernie Sanders, y también frente a Barack Obama en 2008.
En cuanto a los comicios presidenciales, en Nevada perdieron Donald Trump en 2016, Al Gore en 2000, Walter Mondale en 1984, George McGovern en 1972 y Barry Goldwater en 1964, todos ellos vistos como la opción más extremista ya fuese hacia la izquierda o hacia la derecha frente a un candidato del otro partido que representaba mejor el espacio moderado.l