Ambato, una ciudad que busca ser el ‘jardín del mundo’
La festividad de las flores y las frutas está cargada de fuerte mensaje ecológico
técnico del Municipio, que ha aglutinado la creación de seis obras de gran tamaño en este “Circuito de las Flores”.
Cultura y religión
A los conjuntos florales se suman exhibiciones, como una de artistas plásticos de todo Ecuador, una feria artesanal y otra del chocolate, además de presentaciones de danza y música en diferentes plazas.
En la plaza de la catedral, centro neurálgico de la fiesta, la agrupación de danza Arte Corazón de Ambato, ofreció el sábado un espectáculo con lo más granado del baile tradicional andino, donde no faltaron los intensos colores de las faldas de las jóvenes danla zantes, así como los chalecos y ponchos de los chicos, todos ellos al son del fandango.
El obispo de Ambato, Jorge Giovanny Pazmiño, ofició por la mañana la misa de bendición de los elementos característicos de la fiesta en la catedral, junto al obispo de la vecina Latacunga, Giovanni Mauricio Paz Hurtado, ante presencia de miles de feligreses y autoridades como la ministra de Turismo, Rosi Prado.
“El símbolo principal de la ciudad y de nuestros pueblos latinoamericanos siempre ha sido la iglesia”, declaró el prelado de la ciudad al rememorar que la antigua catedral de piedra pishilata, un mineral local de color gris propio de las canteras aledañas, quedó reducida a escombros por el sismo de hace 70 años.
Pazmiño precisó que la festividad de Ambato “nace, precisamente a los pies de la catedral”, cuando los sacerdotes y vicarios del momento crearon una alegoría “que representaba el pensamien