LA SUPREMA CORTE PROTEGE LA IMPUNIDAD
La Corte Suprema protegió ayer de toda responsabilidad a un agente de la Patrulla Fronteriza que mató a un adolescente mexicano con disparos que cruzaron de un lado al otro de la frontera, a territorio mexicano. Para llegar a ese fallo de 5 a 4, hizo malabarismos legales y justificó otorgar protecciones a una agencia plagada de denuncias por uso ilegal de la fuerza.
La mayoría conservadora del Alto Tribunal rechazó la demanda por daños presentada por los padres de Sergio Adrian Hernandez, de 15 años, que recibió un impacto de la bala disparada por el agente Jesus Mesa Jr. Los jueces usaron una interpretación controversial de un fallo anterior, en nombre del rechazo a un presunto “activismo judicial”, que supuestamente es una afrenta a la idea de justicia.
Hernández jugaba en junio de 2010 con un amigo, en una alcantarilla en Ciudad Juárez, allí donde un alambrado separa México de EEUU. Según documentos legales, los jóvenes tocaban el alambrado y corrían. Mesa llegó en una bicicleta, arrestó al amigo de la víctima en un terraplén del lado estadounidense y tiró dos veces, matando a Hernández que corría en el lado mexicano. Mesa dijo que los jóvenes intentaban cruzar.
El Departamento de Justicia exoneró a Mesa diciendo que no infringió los reglamentos de la Patrulla Fronteriza. EEUU rechazó la petición de México de extraditar al agente. Como último recurso, los padres presentaron una demanda por daños contra el agente, basado en un caso anterior, llamado Bivens.
Los jueces rechazaron la validez ese antecedente, diciendo que la naturaleza transfronteriza del nuevo hecho lo hace diferente. Pero en realidad la mala acción del agente, que es lo que se quiere castigar, ocurrió en Estados Unidos como en el caso Bivens. El que la víctima esté en México no lo hace distinto a la impropiedad del oficial cometida en nuestro país.
Hubo en la resolución consideraciones políticas que no tienen nada que ver con la responsabilidad de un agente que mata sin ninguna provocación a una persona indefensa que está del otro lado de la frontera.
Los magistrados dijeron que el tribunal no puede arbitrar en el desacuerdo entre las dos naciones causado por los disparos transfronterizos. ¡Nadie les pidió eso! La posición de México era respetar la ley estadounidense y sus antecedentes. Lo único que se pide es hacer cumplir una decisión anterior de la Corte Suprema basada en el principio de que “por cada error hay un recurso”.
Los jueces dicen que hay un riesgo de socavar la seguridad fronteriza si se dice que Mesa es financieramente responsable de la muerte de Hernández. Esto le da una protección especial a los agentes de la Patrulla Frontera que no tiene ninguna fuerza policial estadounidense.
El fallo es político. Los jueces dan un guiño de aprobación a la política antinmigrante de Trump, al extender la impunidad de la Patrulla Fronteriza.•
Patrulla Fronteriza «Un nuevo dictamen protege a los agentes»