Alimentación contra la ansiedad La salud mental depende de la dieta
El remedio contra esas noches de insomnio, esa irritabilidad o llanto provocada por la ansiedad y la depresión puede estar en tu dieta.
“Existen consideraciones dietéticas muy importantes relacionadas con la liberación de serotonina, dopamina y adrenalina. Mucha gente puede inducir desordenes de ansiedad y depresión por una mala alimentación basada en comida ultraprocesada”, explica la doctora en bioquímica Mariangela Conconi.
Dilatación de las pupilas, aumento en los latidos, contracción de vasos sanguíneos y otras reacciones relacionadas con ansiedad y depresión, están directamente conectadas con la cafeína, azúcar y comida ultra procesada. Si quieres comenzar a relajarte, aléjalos de tu alacena. y ansiedad.
Los carbohidratos complejos, como papas o arroces, pastas y panes integrales, se metabolizan más lento, aportan el azúcar que el organismo necesita de una forma más regulada.
“El azúcar genera ansiedad y es muy importante evitar su consumo directo y de comida ultraprocesada adicionada con este ingrediente”, detalla la especialista. “El azúcar es ocho veces más adictiva que la cocaína, cuando empiezas a tomar cosas muy azucaradas, prendes el mecanismo de recompensa del cerebro”.
Esta reacción, según explica la doctora, es producto de nuestra propia evolución: el organismo desarrolló un mecanismo de recompensa y libera dopamina con todas aquellas conductas que ayudan a la supervivencia.
“Si el cerebro funciona con azúcar y le llega un bombazo, la consecuencia es una recompensa muy fuerte que libera dopamina en el núcleo arcuato del hipotálamo causando una adicción. Intentar dejar el azúcar es similar a dejar de beber, fumar o consumir drogas: genera ansiedad”.
Adicionalmente, el consumo de azúcar genera picos de insulina que el cuerpo convertirá en grasa. En vez de producir energía, va a provocar cansancio extremo, agrega la bioquímica.
Para estar más relajado es recomendable evitar ingredientes como café, té, chocolate y guaraná, que aumentan las pulsaciones y prenden un sistema de alerta en el organismo.
“Estos elementos liberan adrenalina, y ésta libera azúcar al torrente sanguíneo, aumenta las pulsaciones, acelera el metabolismo, y todo esto genera ansiedad”. increíble la importancia del intestino para la tranquilidad.
Consumir prebióticos, probióticos, granos complejos, vegetales, fibra, fruta con cáscara y alimentos fermentados, es importante para alimentar la buena flora intestinal”, detalla la especialista.
Conconi añade que los probióticos son alimentos con los que tus bacterias “buenas” empiezan a multiplicarse, y están presentes principalmente en comida fermentada y fibra soluble.
Verduras de hojas verdes, como espinacas, lechugas, y acelgas, nueces, aguacate y granos complejos también pueden ayudarte contra la ansiedad. ¿Por qué? Por su contenido de magnesio.
“El magnesio forma parte de las reacciones del sistema nervioso y ayuda a las personas a sentirse mucho más calmadas”, detalla Mariangela.
Otros micronutrientes que colaboran a tu tranquilidad son el zinc, que puedes encontrar ostras, yemas de huevo y carne de res, y la vitamina B, presente en aguacate, almendras y carne de res.
También deberías considerar incluir o aumentar el consumo de salmón, sardinas, aceite de oliva, chía y otros ingredientes populares por su aporte de Omega 3.
“El Omega 3 reduce los niveles de inflamación y ansiedad en el cerebro, por lo que es un ansiolítico muy potente”, concluye la experta.