Recién llegados a la política buscan asiento en el Congreso
Falta poco más de una semana para las elecciones primarias del martes 23 de junio y cuatro de los 12 candidatos se presentan por primera vez a una contienda electoral. Esta es solo una de las 12 votaciones al congreso para representar a la ciudad de Nueva York, sin embargo, es una de las votaciones que más atención ha traído tanto por el número de candidatos como por el total de dinero recaudado por todos los candidatos: $2,647,477 dólares.
La pregunta por quién reemplazará al representante José Serrano, quien se retirará después de 30 años de representar al Distrito 15, aún no tiene una respuesta completamente clara: hay un candidato que ha recaudado más de un millón de dólares, pero al mismo tiempo hay candidatos que han recibido el apoyo de figuras políticas como Alexandria Ocasio-Cortez.
Aquí presentamos los perfiles de los candidatos que no tienen carrera política y que vienen de organizaciones comunitarias.
De los 12 candidatos actuales, Mark Escoffery-Bey, propietario de un centro de copiado en Morrisania, es el único candidato actual que no ha enviado a la comisión electoral federal información sobre su campaña. Escoffery-Bey, oriundo de Jamaica, compitió por el asiento de Serrano en 2010. Sobre la agenda política de Escoffery-Bey no se sabe mucho, sin embargo ha dicho que se postula porque quiere contrarrestar lo que considera dinastías políticas en El Bronx porque varias familias tienen más de un miembro en el cargo, incluyendo las familias Arroyo, Serrano y Díaz.
Julio Pabón, puertorriqueño de nacimiento, es un empresario y en el último reporte de la comisión electoral federal reportaba cero dólares recaudados. Pabón aboga por la inversión de más recursos en las pequeñas empresas, mayor orientación financiera, cree que se debe trabajar en un programa para entregar la “propiedad de los apartamentos de NYCHA a los residentes para que puedan mejorar lo que poseen”, dice su plataforma, y desea modificar la ley Jones (The Jones Act) para Puerto Rico.
Marlene Tapper nació en Queens, es consultora legal y en el último reporte de la comisión electoral federal también reportaba cero dólares recaudados. Los puntos de su campaña son la justicia ambiental, la dificultad que encuentran los adultos mayores para jubilarse, reformar las prisiones, el pago igualitario a las mujeres y en este punto aboga para que pase la ley de equidad en el pago de salarios (Paycheck Fairness Act).
Frangell Basora nació en la República Dominicana, es hijo de padres dominicanos y actualmente trabaja en la oficina de participación pública (OPE) del fiscal del distrito en el condado de Kings.
La campaña de Basora registra en la comisión electoral federal (FEC) $11,138 dólares y de acuerdo con él actualmente ha recaudado entre $15,000 a $20,000 dólares. Según los registros en la FEC, su campaña ha recibido cuatro donaciones, la mayor la hizo él mismo. Su agenda se centra en promover la vivienda (permanente, segura, confiable y digna) como un derecho humano. En salud busca reducir la disparidad en el acceso a la atención médica especializada y asegurar acceso a salud mental para minorías. Además propone la creación de una garantía federal de empleo adaptada para las comunidades de más bajos ingresos en Nueva York.
Fuerte apoyo de organizaciones progresistas
Samelys López nació en Puerto Rico y fue criada por su madre dominicana en el sur del Bronx. López es la única de los 12 candidatos que tiene su página web traducida a cinco idiomas: español, inglés, francés, bengalí y árabe.
Su campaña ha sido financiada por contribuciones individuales y en entrevista con City Limits dice que no ha aceptado contribuciones de los comités de acción política tradicionales (PAC), ni dinero de industrias como combustibles fósiles, bienes raíces o farmacéuticas. Sin embargo, el PAC Courage to Change creado por Alexandria Ocasio-Cortez contribuyó a la campaña de López.
Los puntos que resaltó de su agenda son: en vivienda, asegurar la vivienda como un derecho humano universal, instituir el control universal de alquileres, reinvertir completamente en vivienda pública, construir 12 millones de unidades de vivienda social. En salud tiene dos propuestas anudadas. Por un lado, quiere cobertura sanitaria universal para todos, y como Bernie Sanders, plantea negociar con las empresas farmacéuticas para reducir el costo de los medicamentos de prescripción. Por otro lado, aboga por el cuidado infantil universal para familias trabajadoras y el subsidio infantil para facilitar a las familias la crianza de sus hijos en la comunidad.
Dinero recaudado para la