El Real Madrid le da la bienvenida a Rufete
Tocado tras encadenar dos derrotas consecutivas y con Francisco Rufete como última bala para evitar el abismo, el Espanyol, colista de La Liga, agota sus opciones de permanencia contra un Real Madrid que no tiene espacio a las concesiones y se juega seguir en lo más alto de la tabla.
El duelo llega marcado por una decisión que sorprendió hasta a jugadores del Espanyol. Abelardo Fernández fue despedido en la víspera de la visita del equipo merengue y se encomienda el club a Rufete.
Sí, el que era director deportivo de la entidad fue designado como entrenador del primer equipo ante la sorpresa de todos.
Se convierte Rufete en el cuarto técnico del Espanyol en una temporada aciaga que, a falta de la confirmación matemática, puede poner fin a 26 años ininterrumpidos en Primera División.
A siete jornadas para que finalice la competición, el equipo blanquiazul se acerca al abismo con la salvación a ocho puntos y un calendario exigente, con Real Madrid y Barcelona como principales escollos.
Tras regresar del parón por el coronavirus con buenas sensaciones ante el Alavés (2-0), la reacción del Espanyol fue más un espejismo que una realidad y ha acabado también con Abelardo. Desde aquel prometedor inicio, encadena un punto de nueve posibles, tras el empate contra el Getafe y las derrotas contra Levante y Betis.
La única buena noticia para Rufete con vistas a su debut es que podrá contar con todos los jugadores. La única duda de Dídac Vilà, baja por molestias ante el Betis. En la zaga, recupera al uruguayo Leandro Cabrera y al colombiano Bernardo Espinosa, sancionados uno y dos partidos respectivamente.
Su estreno no puede tener mayor complejidad. Le visita el único equipo que ha ganado todas las jornadas disputadas desde el regreso de la competición. Un Real Madrid lanzado por su objetivo de ganar la Liga aunque con claros síntomas de cansancio en su último encuentro frente al Mallorca.
Sin alardes en el juego, el Real Madrid gana y regresó del parón con una buena preparación física y psicológica. En la defensa radica gran parte de su éxito. Dos goles encajados en las cuatro jornadas disputadas y una pegada aumentada tras el regreso de Eden Hazard.