TRUMP ATACA EL DERECHO AL VOTO
El tuit del presidente Donald Trump donde sopesa la posibilidad de retrasar la elección presidencial de noviembre tiene el fin de crear dudas sobre una votación en la que de realizarse hoy él sufriría una de aplastante derrota.
Que quede claro: el Presidente no tiene el poder para modificar la fecha de la elección. La Constitucion le da esa facultad al Congreso. Eso no le impide a Trump sugerirlo como si él tuviese la autoridad de tomar esa decisión. Lo mismo ocurre cuando Trump da a entender que quizás no reconocerá una derrota. La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, ya lo puso en su lugar diciendo que se puede “fumigar” la Casa Blanca si él no se quiere ir.
El caos es el medio ambiente en donde Trump se siente cómodo. Dentro de su confusión y corrupción, le gusta ser impredecible para sacar ventaja en medio de la confusión cuando él es el centro de ella. En este caso el centro son las instituciones de la democracia, y Trump debe recordar que no es más que el inquilino temporal de la Casa Blanca.
Es decir, el 20 de enero de 2021, automáticamente dejará de ser presidente.
Dicho esto, hay un debate sobre la importancia que hay que darle al tuit de este presidente que lo usa un sinfín de temas como ajustar cuentas, hablar de una acción gubernamental o hacerse el gracioso. Sus simpatizantes critican a los medios por darle tanta importancia cuando a primera vista son barbaridades inocuas. Otros critican que los medios le hacen el juego cuando quiere solo quiere distraer o llamar la atención.
Pero no se pueden ignorar las palabras del presidente. Trump querría muchas veces que no se hablara de lo que dice. Es más, ante tanta marcha y contramarcha, quiere que no sepamos lo que realmente dice para acomodarlo a su manera. Pero la Casa Blanca definió hace mucho tiempo que la cuenta de Twitter de Trump es fuente de declaraciones presidenciales y así hay que tomarlo.
Más aún, cuando Trump dice que esta elección está expuesta al fraude si se permite el voto por correo, que es obviamente una vía para evitar que la ciudadanía se contagie del coronavirus. Este voto jamás fue criticado hasta ahora, y el mismo Trump así ha votado en las últimas elecciones.
Faltando tres meses para las elecciones, se intensifica la campaña de la Casa Blanca para desprestigiarlas y sembrar la duda y el caso. Más peligroso son aún las leyes estatales que desalientan y dificultan el voto de las minorías. Y que se nieguen desde ya fondos al Correo federal para hacer frente al alto caudal de votos que se viene.
En resumen, la mejor respuesta al twitter de Trump es votar.
Busca el caos y la confusión «El Presidente no tiene el poder para modificar la fecha de las elecciones. La Constitución se lo da al Congreso federal.»