CUIDADO CON EL FRAUDE
El presidente Donald Trump disfruta embarrar las aguas. Le gusta eliminar toda transparencia que dé tranquilidad y genere confianza. Prefiere la confusión y el caos. Es como el pescador que aprovecha el río revuelto. Aunque en este caso es él, quien lo revuelve.
Cómo interpretar de otra manera los comentarios del presidente donde sugiere a sus seguidores que voten dos veces. Esto lo dijo a un medio de Carolina del Norte y luego lo repitió en su twitter. Más tarde fue bajado del sitio social, porque contradice sus reglas, porque alienta la violencia y propone hacer trampas en la elección.
En estos casos lo primero que se piensa es que este exabrupto trumpista es una de esas barrabasadas para distraer la atención. Cada vez es más difícil saber cuando el presidente dice tonterías y cuando es algo calculado y parte de una tendencia o plan. Es usual que en esos casos salga un funcionario para aclarar qué es real y lo dicho queda como un delirio presidencial.
Trump, en cuanto a las elecciones, siempre crea dudas. Abre el paraguas del fraude electoral cuando no hay pruebas de eso. Lo hizo en 2016 y ahora está en una campaña para denunciar un próximo fraude electoral en noviembre con el voto por correo. Hay estados como Oregon que solo votan por correo sin problemas, pero eso se pierde en la histeria que se promueve en la Casa Blanca.
Ahora Trump sugiere a sus simpatizantes votar por correo primero y después presentarse a votar de nuevo en persona. La excusa es para que el votante se asegure que su voto no se ha perdido. Quizás calcula que en el peor de los casos lo van rechazar del centro electoral, en el mejor -para los republicanosvotó dos veces.
Es como quien roba un banco para estar seguro de que los ahorros están protegidos en esa sucursal. Si lo capturan se va preso. No puede decir que está probando la seguridad. Si lo logra, demuestra las deficiencias del sistema y de paso se queda con el dinero.
Trump sigue diciendo hasta el día de hoy que ganó el voto popular en 2016 porque millones de indocumentados votaron ilegalmente en California y que miles de votantes viajaban en autobuses de Massachusetts para votar en New Hampshire. El mandatario creó una comisión para mostrar que estaba en lo cierto, que fracasó rotundamente en su misión y debió cesar sus deliberaciones muy pronto.
El presidente está soboteando la elección y creando dudas allí donde no las hay. La noche electoral puede ser confusa. Probablemente no se resuelva la figura del ganador de inmediato. Falsamente simula estar tan seguro de su victoria, que solo puede perder por fraude. Así prepara el terreno entre sus seguidores en el caso de que las encuestas que lo muestran perdiendo -que son todasestén en lo correcto. Hay que estar atentos a lo que ocurre ese día.l
Trump
Respecto a las elecciones, trump clama por fraude cuando no hay; ahora él sugiere a sus partidarios que voten dos veces