San Lorenzo suspende sus entrenamientos
El club argentino hizo más test del COVID-19 tras los positivos de su técnico, Mariano Soso, y dos jugadores
Argentina, Bolivia y Venezuela son los únicos países de Sudamérica que no tienen fecha definida para el regreso del fútbol profesional, situación que los coloca en desventaja rumbo al reinicio de la Copa Libertadores.
Brasil volvió en junio, Paraguay retornó en julio, Uruguay, Ecuador, Perú y Chile regresaron progresivamente durante agosto y Colombia retomará el torneo local a mediados de septiembre.
Así, a una semana del reencuentro de los equipos argentinos con el torneo continental, la desventaja con respecto a la mayoría de los rivales está muy marcada.
Boca es el caso más notorio. En el club son conscientes de la gran desventaja que llevarán a cuestas hasta Asunción, donde enfrentarán a Libertad, que tendrá ya 11 partidos disputados.
Tanto el entrenador, Miguel Ángel Russo, como el preparador físico, Damián Lanata, estaban de acuerdo en que sus futbolistas precisarían un tiempo de entre 45 a 60 días de puesta a punto.
Del 10 de agosto (fecha de retorno a las prácticas) hasta el partido en Paraguay habrán pasado 38 días. Además, la ‘explosión de la ‘burbuja sanitaria’, que generó 22 jugadores contagiados, acortó el tiempo de preparación.
Se suspendieron los entrenamientos de la semana pasada, la mayoría solo se ejercitó vía Zoom desde sus habitaciones y únicamente hubo 10 jugadores en actividad sobre el campo.