Entre brujas y fantasmas
Los días se han puesto más fríos y los árboles ya pierden sus hojas. Es el mejor momento para sentarse a planear, con pay de calabaza en mano, ese futuro viaje que implique visitar algunos sitios tétricos.
¿Amas el terror? Quizá quieras deambular por el Mary King’s Close, un callejón en Edimburgo que transporta a los visitantes a vivir espeluznantes momentos. Un grupo de actores da vida a los residentes del lugar, entre ellos a Walter, el valiente personaje que se encarga de limpiar las casas de las víctimas de la peste. También podrás conocer la historia del espíritu de la pequeña Annie, quien está desconsolada tras perder a su muñeca favorita.
Si sufres claustrofobia y prefieres asustarte a cielo murieron debido a las armas de fuego.
En Nueva Orleans hay que darse una vuelta por el Historic Voodoo Museum. Ahí hay figuras y esculturas que explican los orígenes de la práctica vudú. Quienes visitan esta festiva urbe, también se dan un tiempo para tomar un tour “vampiresco”, al recorrer las calles para intentar toparse con esas criaturas y oír una que otra leyenda. El paseo, en tiempos de pandemia, debe realizarse con cubrebocas.
Para otra aterradora experiencia, una que lleva detrás un vergonzoso pasado, hay que conocer el Salem Witch Museum, en Massachusetts, donde el oscuro capítulo de las cacerías de brujas del siglo 17 se cuenta mediante esceno
grafías y figuras de tamaño real. Toma en cuenta que, pese a que el museo está abierto, se requiere reservación para evitar aglomeraciones.
En el futuro, podremos ir a conocer esos lugares que entre sus paredes guardan historias tan estremecedoras como fascinantes.