Quiere relajar el Grammy
El mexicano será el encargado de animar la entrega de premios
Sí formal, pero no muy serio. Sí divertido, pero no irreverente. Así es como se visualiza Carlos Rivera para su desempeño como coconductor de la próxima entrega de los premios Latin Grammy.
El cantante dijo que será un reto ser más relajado cuando le toque estar en el escenario en la gala que será dirigida por José Tillán.
"Ahí es donde viene el reto, sin perder el respeto y la parte ceremonial de lo que significan nuestros premios más importantes de la música, creo que hay que ser un poco más cercanos y menos rígidos. Algunos (de los nominados) estarán en esmoquin y vestido largo y otros en pijama (desde sus casas), todo será sorpresa. Creo que será más humano", dijo Rivera en videoconferencia.
Tras el anuncio de que él iba a ser coanfitrión, tal como lo hizo en el 2018 junto con Ana de la Reguera, al intérprete de "Te Esperaba" y "¿Cómo Pagarte?" le llovieron en redes sociales peticiones para su posible vestuario en la fiesta musical que se hará el 19 de noviembre por Univisión: traje de baño, bata, toalla, ropa casual y esmoquin.
"Estaría increíble, pero no creo que me dejen, sí estaría divertido. Es que depende de los premios, si fueran unos MTV, a lo mejor sí, pero (en estos) lo veo un poco complicado".
De acuerdo con la logística propuesta para la 21 Entrega de los Latin Grammy, habrá muy pocos invitados en Miami y la mayoría de los candidatos estará en su casa. Serán algunos números musicales en el sitio sede y otros se efectuarán vía remota desde diversos puntos geográficos.
Con miras a respetar los protocolos sanitarios, este año no habrá alfombra roja, la sala de prensa será virtual y las dinámicas de interacción online tendrán más peso que las presenciales.
Eso sí, da por hecho que habrá química absoluta con la actriz puertorriqueña que lo acompañará.
"La conocí en casa de Eva Longoria, me pareció encantadora, hablamos el otro día