Los errores en los historiales de crédito están aumentando y los consumidores son injustamente penalizados
Josh Thomas, es un programador de computadoras independiente en Port Orchard, Wash., estaba preocupado por sus perspectivas de trabajo después de casi 3 meses de encierro por culpa de COVID-19. Por eso en mayo pasado se registró en línea para una oferta de la emisora de su tarjeta de crédito, Barclays Bank, para posponer su pago mensual por hasta 3 meses.
Pero 3 meses después, Thomas revisó sus reportes de crédito y descubrió que su puntaje había bajado. Los reportes detallados que produjeron las compañías de crédito grandes - Experian, Equifax, y TransUnion – empresas, como FICO y VantageScore, las usan para calcular un puntaje crediticio de 3 dígitos. Y ese puntaje lo usan los prestatarios para decidir si les otorgan sus tarjetas de crédito, préstamos de autos, préstamos estudiantiles e hipotecas a los consumidores y con esto también deciden qué interés cobrarles.
Thomas encontró que Barclays erróneamente reportó que Thomas se atrasó con un pago de su tarjeta de crédito en julio, durante el aplazamiento de pago. Sometió una queja a las agencias de crédito para que corrigieran el error pero no tuvo éxito. En septiembre demandó a Barclays como parte de una demanda colectiva para eliminar el pago retrasado de sus reportes crediticios. El caso está pendiente.
Tener un puntaje de crédito más bajo resultó en que Thomas demorara iniciar un negocio sin fines de lucro que esperaba lanzar, dice su abogado Chris Rosfjord.
A medida que un número creciente de estadounidenses enfrenta la pérdida de empleos y la inseguridad económica durante la pandemia, más personas que nunca reportan errores en sus informes de crédito, lo que hace que una situación financiera ya de por sí precaria se ponga peor. Las quejas ante la Oficina de protección financiera del consumidor (CFPB), sobre errores en los informes de crédito han alcanzado niveles récord, según el U.S. Public Interest Research Group, una organización de políticas y defensa del consumidor.
Estos errores han sido un problema a largo plazo para los consumidores. El mejor y más extenso estudio sobre el tema, realizado por la Comisión Federal de Comercio (FCC) en 2012, encontró que 1 de cada 4 consumidores tenía al menos un error en sus informes. Pero la crisis de COVID-19 ha empeorado la situación, dice Syed Ejaz, analista de política financiera en Consumer Reports.
“Este es un problema que existía antes de la pandemia”, dice, “pero se ha vuelto más dañino y urgente porque limita el acceso a crédito y financiamiento asequibles a las personas que se han visto afectadas financieramente por COVID-19”.
Parte del problema se deriva involuntariamente de la Ley CARES, que fue aprobada por el Congreso el pasado mes de marzo como una forma de ayudar a las personas con dificultades durante