Jornadas de vacunación
El concejal Mark Gjonaj y Essen Health Care están realizando jornadas de vacunación los miércoles y sábados. Para hacer una cita, llame a la oficina del concejal al (718) 931-1721.
demia. Ni cumplieron con ninguna de las medidas de distanciamiento social en los espacios de trabajo. Nosotros por necesidad veníamos recibiendo un pago por debajo de lo legal, pero a eso se suma que cuando caímos enfermas, nunca quisieron reconocer nuestros días de enfermedad”, relata Dávila quien asegura que parte de su rutina era doblar 80 libras de ropa por hora.
"Nos hicieron la vida imposible"
Estas inmigrantes que interpusieron una demanda con el apoyo del Centro de Trabajadores de Lavanderías ante una corte en Manhattan, narran que desde que exigieron sus derechos, los “patrones” empezaron a presionarlas con algunas tácticas.
“Se ponían detrás de nosotras a apurarnos y acusarnos de lentas. Nos grababan con un celular para después decir que no hacíamos bien nuestro trabajo. Modificaron nuestros horarios. Empezaron a aplicar otras condiciones.
Nos hicieron la vida imposible”, describió Cecilia.
Cuentan las trabajadoras, que una vez que iniciaron el proceso de reclamo, los patrones intentaron persuadirlas a que detuvieran el procedimiento bajo el argumento que “sería peor para ellas, ya que no lograrían nada. Y además se quedarían igual en la calle, porque podrían cerrar el negocio”.
Sandra agrega que el trabajo de las dobladoras era realizado en un sótano sin ningún tipo de ventilación, en donde el verano era realmente “infernal”, sumado al calor que de por sí emanan las máquinas secadoras. Y allí, en ese espacio cerrado, debieron permanecer en las largas jornadas para sobrevivir, durante los días más complicados de la pandemia.
“Obviamente uno necesita trabajar honradamente. Y lo quiere hacer lo mejor posible. Por eso toleras muchas cosas, porque necesitas el dinero. Mi esposo se había quedado sin trabajo. Pero llegó un momento en donde todo llegó a condiciones inhumanas. Fíjate que cuando nos sentíamos mal, lo que hacían era darnos una pastilla para que siguiéramos trabajando”, aseguró.
La inmigrante relata que nunca le proporcionaron a las mujeres trabajadoras ni siquiera mascarillas, porque advertían que era solo para los ‘drivers’, es decir los conductores que se encargaban de distribuir los pedidos.
“Cuando cerraron las puertas del negocio para el público ni siquiera nos avisaron, tampoco nos permitieron retirar algunas cosas personales que teníamos. El maltrato llegó al extremo. Hasta el papel higiénico del baño que usábamos, lo teníamos que llevar nosotras. Porque ellos decían que nosotros nos lo robábamos”, acotó.
Crisis expansiva y cruel
Rosanna Aran, presidenta de LWT, asegura que la historia de Cecilia y Sandra es apenas una muestra de toda una cadena de abusos laborales que durante la crisis de salud pública causada por el coronavirus, se hizo aún más expansiva y cruel en todos los condados de la ciudad de Nueva York.
“Por ello iniciamos una serie de demostraciones en frente de lavanderías, en donde los propietarios han cometido violaciones, no solo a las leyes, sino a las condiciones mínimas de seguridad”, dijo la activista.
El Diario solicitó vía correo electrónico a ‘Wash Supply’ alguna reacción sobre estas denuncias. Al cierre de esta edición no se había recibido alguna respuesta.
El propietario de una lavandería de monedas del Bajo Manhattan, al ser consultado sobre los abusos a los empleados de estos comercios muy populares en las calles de la Gran Manzana, manifiesta que muchas veces llegan a “acuerdos verbales” con los pocos trabajadores que pueden tener. Y éstos son quienes los incumplen.
“No podemos calificar a toda una industria tan diversa como explotadora. Hemos hecho un esfuerzo gigantesco por mantenernos de pie en esta crisis. La mayoría de estas empresas son familiares, en
4,000 lavanderías en promedio funcionan en la Gran Manzana. 36% de los trabajadores encuestados por LWT, es decir más de un tercio, reportan que no reciben pagos por tiempo extra. 1 de cada 5 trabajadores reportaron un salario por hora por debajo de los $10. 64% detallaron que hacían labores adicionales a las que originalmente se le había contratado. 79% de los trabajadores son inmigrantes. 66% de los empleados en servicios de lavandería, tienen el español como idioma principal. 54% indicó que habían sido blanco de alguna forma de acoso, comentarios racistas y despectivos. 97% estuvo expuesto al cloro y manejó ropa contaminada.
donde trabajan son los mismos dueños. Muchos estamos quebrados. Todo ha bajado. Apenas cubrimos la renta”, dijo el comerciante que declinó compartir su identidad.l
El actual presidente del condado de Brooklyn Eric Adams, número 2 en las encuestas por la Alcaldía de Nueva York, que todavía no muestra a un líder absoluto separado del lote de aspirantes, asegura que su experiencia y su historia de vida le dan las credenciales necesarias para reemplazar en el cargo a Bill de Blasio.
El político de 60 años, nacido en Brooklyn y criado en Jamaica, Queens, habló en entrevista con El Diario sentado en un café en su condado natal, y allí insistió en que, de llegar a la Alcaldía de Nueva York, hará un revolcón en el manejo de los principales asuntos de la ciudad. En su gobierno, promete que las comunidades tendrán voz y poder en las decisiones que se tomen, centrará sus planes de acción en un trabajo más eficiente de las agencias municipales para proveer a los más necesitados, pero al mismo tiempo defiende la necesidad de trabajar de la mano de desarrolladores inmobiliarios honestos y buenos. A los malos asegura que los perseguirá.
De cara a las elecciones primarias del partido demócrata del 22 de junio, Adams, hijo de una madre soltera que limpiaba casas, y quien en su vida ha sido lavaplatos, policía, activista contra el racismo, senador estatal y hasta escritor de recetas para comer saludable desde que supo que tenía diabetes, Eric Adams, dice tener claro que es el progresista que la ciudad necesita para encarrilarse tras la pandemia del COVID-19
¿Por qué decidió lanzarse a buscar la Alcaldía en medio de semejante crisis?
Creo que uno no puede hacer esto si no cree en ello, no se puede hacer si no ha estado trabajando consistentemente. Yo he estado bajo ataque todo el tiempo por 35 años y no me han puesto abajo. Eso demuestra mi nivel de consistencia, y además me lancé porque sé lo que es ser un trabajador que le paguen menos, yo fui lavaplatos, sé lo que es estar en el borde del desamparo, sé lo que es ser víctima de abuso policial, cuando tenía 15 años, yo sé lo que es pelear por reformas, sé lo que es ir a la escuela por la noche. Y no me lancé a estas elecciones solo para ser elegido sino para trabajar por la gente. Yo soy un trabajador duro. Fui a la cárcel y fue una batalla para mí, así que estoy compitiendo porque sé que puedo manejar la ciudad de una manera mejor y luchar contra las disfuncionalidades que crean las inequidades e injusticias.
¿Cuál sería el primer cambio que Nueva York vería bajo un mandato suyo?
Primero que todo quiero decir que mi conversación es más elevada que cualquiera de las otras personas que están compitiendo por el cargo, porque tengo claro que el poder de las comunidades son las agencias. Si no controlas las agencias, no puedes controlar a las comunidades... La gente paga impuestos y quiere recibir recursos a través de las agencias. Yo quiero que las comunidades tengan protagonismo y además que las agencias los represente. Si estamos en un cuartel policial en Washington Heights, el comandante de esa estación, debe ser un comandante que hable español, los directores de escuela, la gente del Departamento de Sanidad allí. Uno tiene que ver ese liderazgo y no significa que cada persona de sanidad deba hablar español, pero la persona que toma las decisiones debe ser de la comunidad y debe conocer la cultura de esa comunidad... voy a usar un estándar de criterio diferente para elegir a la gente que vaya a manejar mis agencias. Tienen que entender la cultura y las preocupaciones de las comunidades.
¿Qué plan concreto tiene para personas de bajos recursos?
Cuando empezamos a hablar sobre vivienda asequible o empezamos a hablar sobre asegurarnos que los
Eric Adams busca un mandato donde ponga a marchar a la ciudad con un trabajo conjunto entre organizaciones comunitarias y agencias municipales