EL RACISMO OCULTO DE TUCKER CARLSON
Los recientes comentarios de Tucker Carlson, anfitrión de la cadena de televisión Fox New, sobre el reemplazo del voto euro-estadounidense por un electorado nacional compuesto por minorías étnicas no es nuevo. La base de esta creencia es tan vieja como el libro “Mi Lucha” de Adolfo Hitler.
Los grupos racistas, mismos que se diseminaron en suelo nacional después del ataque a las Torres Gemelas de New York en septiembre 11 de 2001, nutrieron este tipo teorías conspiratorias en Internet.
A esta información destructiva solo tenían acceso aquellas personas interesadas en este tema, muchos de ellos pertenecientes a grupos subversivos de extrema derecha, aunque también hubo personas –como yo y otros investigadores—, quienes tenían intereses académicos.
Tucker Carlson está creando un espacio real en los medios de comunicación (televisión) a los grupos racistas; está contribuyendo a la diseminación de teorías conspiratorias y negativas.
Inicialmente, de acuerdo a los creyentes de “gran reemplazo”, existe una especie de maquinación no solo por parte de los líderes políticos del país, sino también de la sociedad, de acabar con la población euro-estadounidense a través de la unión física de los diversos grupos étnico-nacionales.
El resultado de esta unión es la creación de una mezcla de etnicidades y la pérdida de la “pureza de las razas”, especialmente de “raza blanca”. El presidente demócrata
Barack Obama y/o el ex gobernador de Florida Jeb Bush son ejemplos de este tipo de uniones, los cuales son altamente criticados por los grupos racistas.
Por una parte, Obama es producto de un padre de raíces africanas y una madre euro-estadounidense y, por la otra, Jeb Bush contrajo matrimonio con una mujer mexicana.
La madre de Obama y Bush están rompiendo con el proceso evolutivo de la raza blanca hacia la supuesta creación de una sociedad “altamente sofisticada y ordenada de solo euro-estadounidenses”.