LA MIGRACIÓN IRREGULAR
La inmigración es el punto débil del presidente Joe Biden dentro de una aprobación general durante los primeros 100 días desde que está en la Casa Blanca. La pandemia sin lugar duda fue la prioridad planeada a enfrentar por la nueva administración, el arribo de miles de menores indocumentados fue la crisis no anticipada.
Los republicanos presurosos de desgastar la imagen del mandatario demócrata centraron su atención y sus críticas en la frontera a falta de controversias y escándalos de una presidencia que es felizmente aburrida en relación a su predecesor. Se quejan de que hay una crisis fronteriza y que la vicepresidenta Kamala Harris, que fue puesta a cargo de la papa caliente de la inmigración no visita la región del problema.
Ellos están parcialmente correctos. Sí, hay una crisis humanitaria, pero esta no se centra en la frontera sur con México, donde se realizan las peregrinaciones republicanas, preocupados hoy por la niñez cuando lo ignoraron
eldiariony.com
El Diario La Prensa/ An impreMedia
Operating Co. LLC company durante el gobierno anterior.
La crisis humanitaria está en el triángulo centroamericano integrado por El Salvador, Guatemala y Honduras. Es allí donde se necesita la atención de la vicepresidenta. Es en esa región donde está el mal cuyos síntomas se ven en la frontera entre México y Estados Unidos.
El Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas estima que los huracanes consecutivos y el impacto económico de la pandemia de coronavirus aumentó en 7.8 millones la cantidad de personas que enfrentan el hambre este año en Guatemala, Honduras y El Salvador.
A esto hay que sumarle la corrupción gubernamental y la desesperación de los padres que no quieren que sus hijos sean pandilleros o una víctima de ellos.
Porque creemos que la raíz del problema está muy lejos de la frontera nos parece alentador el paquete de ayuda que se arma bajo el auspicio de Harris y las pláticas virtuales con los presidentes de la región en busca de una alternativa de fondo.
Javier Casas, General Manager
Carmen Villavicencio, Executive Editor. Angel Vazquez, Sales and
Circulation. Rossana Rosado, Publisher Emeritus
Iván Adaime, CEO Javier Casas, CFO Rafael Cores, Content
El envío de 310 millones de dólares como ayuda a la región es una buena señal. Esta cantidad reúne fondos de ayuda externa, con dinero de los departamentos de Agricultura, Defensa y Estado. Será distribuido a lo largo de las grandes necesidades económicas de una agricultura devastada como para seguridad y servicios básicos.
La ventaja es que los fondos no necesitan pasar por una discusión legislativa sobre inmigración. El problema es que la cantidad es insuficiente para revertir los problemas que causan la emigración. Hay quienes dicen que es necesario un Plan Marshall para Centroamérica, recordando la ayuda estadounidense para reconstruir Alemania después de la Segunda Guerra Mundial.
Una ayuda de esa magnitud es tan ideal como fantasiosa. Hoy lo necesario es un enfoque ambicioso y de múltiples niveles para abordar las causas fundamentales de la migración irregular y fortalecer una gestión colaborativa de la migración en América Central.•
ElDiario
Fundado en 1913
El Diario
Impremedia