Descafeinada reforma migratoria divide a los activistas
Grupos de activistas y de defensa de los derechos de los inmigrantes mostraron ayer unas marcadas diferencias no vistas en años sobre cuál es el objetivo a conseguir en la reforma migratoria que se debate en el Congreso, ya sea una opción más realista y menos ambiciosa o apostar al todo o nada para lograr un camino a la ciudadanía de millones de indocumentados. Mientras unos son partidarios del “más vale pájaro en mano que ciento volando”, otros han salido a las calles y las redes sociales en las últimas horas para recordar que los inmigrantes jugaron en 2020 un papel importante en dar a los demócratas el actual control de la Casa Blanca y el Congreso, y que ahora es el momento de pagar favores. La unidad en los pedidos se venía resquebrajando en las últimas semanas tras la negativa de la parlamentaria del Senado de aceptar dos ambiciosos intentos demócratas de reforma migratoria, pero el miércoles la distancia se hizo más patente. Los demócratas de la Cámara de Representantes presentaron una nueva versión del plan de gasto social que lidera el presidente Joe Biden, en la que los inmigrantes se deben conformar con un permiso de permanencia en el país por 5 años, renovable hasta 2031, eliminando el paso a la ciudadanía. Angélica Salas, directora de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA), dijo en Twitter que en 24 horas los esfuerzos de lograr la residencia permanente para 8 millones habían pasado a un permiso de trabajo de 5 años.
“Todos culpan a los (congresistas) moderados,
¡pero lo único que veo es una falta de coraje para luchar por nosotros!”, subrayó la activista.
Sin embargo, ayer, líderes como Frank Sherry, director ejecutivo del grupo America’s Voice, dijo que aunque el proyecto “no es el camino hacia la ciudadanía que merecen los inmigrantes”, es lo “posible” este año. “Después de 35 años de luchar por la reforma, creemos que el programa de permisos de inmigración ofrecerá protecciones significativas a millones. Hagamos esto este año y continuemos la lucha en los próximos años hasta que ganemos la ciudadanía para todos”, afirmó. En una conferencia de prensa ayer, Teresa Romero, presidenta del Sindicato de Trabajadores Agrícolas (UFW), dijo que los permisos de trabajo y la protección ante la deportación ayudarían a millones de campesinos que viven con miedo. También destacó el hecho de que los inmigrantes puedan viajar a sus países de origen. La “soñadora” y gerente de Relaciones con el Gobierno de FWD.us, Maria Praeli, compartió la opinión de Romero, destacando que los permisos de trabajo son “una real oportunidad de transformar la vida de millones de inmigrantes dando la posibilidad de trabajar y detener el miedo a la deportación”.
Pero no lo ven igual los jóvenes del influyente grupo de “soñadores” United We Dream, que nada más conocer la nueva versión de la Cámara de Representantes salieron a protestar contra una iniciativa “inaceptable” para ellos, pues, en su opinión, debería incluir un camino hacia la ciudadanía. sus promesas electorales.