¿Será un torneo de exhibición este año?
La ATP podría entrar en una disputa legal por la prohibición de jugar a los tenistas rusos y bielorrusos
La Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) estaría dispuesta a entrar en una disputa directa contra los organizadores del torneo de Wimbledon, el Grand Slam más antiguo del mundo del tenis, que se transformaría este año en un certamen de exhibición con una bolsa de premios de más de 40 millones de dólares.
Asoman los ‘fantasmas’ de lo que sucedió hace casi 50 años: en 1973 hubo un boicot que sufrió la competencia cuando 81 jugadores se manifestaron en contra de una sanción que la Federación de Tenis de Yugoslavia le puso a Niki Pilic por negarse a jugar la Copa Davis frente a Nueva Zelanda.
Si la ATP decide ratificar este pedido de las figuras masculinas en estos días, resultaría una clara respuesta provocativa a lo que remarcó Ian Hewitt, presidente del All England Club, quien manifestó que la prohibición de no permitir la participación de jugadores rusos y bielorrusos, incluidas estrellas como Daniil Medvedev, Andrey Rublev y Aryna Sabalenka, fue “la decisión más responsable posible dadas las circunstancias”, una determinación de origen político a raíz de la invasión de Rusia a Ucrania.
La ATP decidió que en los torneos del circuito los jugadores de Rusia y Bielorrusia podían jugar, pero sin representación de sus países, es decir, sin llevar su bandera ni tocar su himno nacional.
Según informó el diario británico ‘The Telegraph’, algunos expertos consultados insisten en que el italiano Andrea Gaudenzi, director ejecutivo de la ATP, estaría dispuesto a apoyar la postura de los principales tenistas.
“Hubo algunas conversaciones en el seno del Consejo de Jugadores. Lo único que podemos hacer es mantenernos en contacto con todas las partes y proteger a todos los tenistas, que es a quienes representamos” Rafael Nadal, Miembro del Consejo de Jugadores de la ATP
Él tendría la última palabra en la Junta de la ATP que está formada por tres representantes de jugadores y tres representantes del certamen.
El Consejo de Jugadores de la ATP está conformado actualmente por el suizo Roger Federer, el español Rafael Nadal y el escocés Andy Murray, junto con otros nueve representantes del circuito. En cambio, el serbio Novak Djokovic renunció hace 18 meses con la intención de iniciar un sindicato independiente.
“Lo siento por todos. Lo siento por los jugadores que no pueden jugar, y no apoyo ni a un lado ni al otro”, hizo público su pensamiento
Murray cuando se disputó el Masters 1000 de Madrid hace más de una semana. Su posición neutral fue una sorpresa para los organizadores de Wimbledon.
Nadal también fue consultado sobre el tema, sin dar una respuesta tajante: “No tengo una opinión clara, aunque hubo algunas conversaciones en el seno del Consejo de Jugadores. Lo único que podemos hacer es mantenernos en contacto con todas las partes y proteger a todos los tenistas, que es a quienes representamos. No voy a dar mi opinión personal porque no importa en este tema y porque estamos trabajando internamente en ello”.
La WTA no se ha pronunciado al respecto, pero según el medio inglés se inclinaría en la misma posición que el circuito masculino. Las inscripciones al cuadro principal cierran seis semanas antes del comienzo y eso implica que la determinación debe ser inminente, porque sucederá la próxima semana. El certamen sobre césped más célebre está previsto que comience el 27 de junio.
Como Wimbledon es un evento independiente dentro del circuito profesional y es dirigido por un club de miembros privados, el único recurso que tienen la ATP y la WTA para expresarse en contra de la decisión del All England Club de prohibir el acceso a jugadores de Rusia y Bielorrusia es retirar sus puntos de clasificación, lo que significa que sería básicamente un torneo de exhibición.
Si así ocurre, podría considerarse el mayor enfrentamiento entre los jugadores y Wimbledon desde aquel boicot de 1973.