Líder indígena llama a reactivar protestas
El gobierno de Lasso enfrenta presiones populares para que cambie el rumbo económico del país
Iza aseguró que las acciones de protesta se han sentido en provincias como las andinas de Chimborazo, Azuay, Bolívar, Cotopaxi, Pichincha, Carchi, Imbabura, Tungurahua, Cañar; las costeras de Santa Elena y Santo Domingo de los Tsáchilas; y las amazónicas de Orellana, Pastaza, Sucumbíos y Morona Santiago.
Aseguró que en esta jornada la Policía recrudeció la represión, detuvo a una veintena de manifestantes y resultaron heridas unas quince personas.
Asimismo, dijo que el pliego de demandas que la Conaie presentó como esencia de la protesta, fue ya exhibida al
Gobierno hace un año, pero se lamentó de que no haya habido una respuesta oficial.
La plataforma de lucha del movimiento indígena incluye la congelación de los precios de los combustibles, el control estatal para impedir la escalada de los precios, anular las privatizaciones, aplicar una moratoria de deudas para los campesinos y otra moratoria para las actividades mineras.
Remarcó que el Gobierno ha aplicado medidas de ajuste impopulares impuestas desde el Fondo Monetario Internacional (FMI) que, además, benefician sólo a los grupos poderosos del país.
Iza pidió a los banqueros y empresarios que “dejen de ganar por un momento”, con “tasas de ganancia abusivas”, en un entorno de crisis económica que afecta sobre todo a la población pobre.
El dirigente justificó la convocatoria a la protesta, aunque remarcó que las organizaciones indígenas “jamás” van a “desafiar la ley”, aunque “la ley ha sido desafiada por el hambre”.
El presidente de la Conaie dijo que, ante el nivel de crispación social que vive el país, es probable que vuelva a ser detenido y condenado por presión del Gobierno, pero enfatizó que la protesta se mantendrá porque es un derecho constitucional que le asiste al pueblo.
Reprimen a estudiantes
Mientras, una nutrida marcha de estudiantes en Quito fue dispersada por una nube de gas lacrimógeno lanzada por la Policía en una plaza céntrica de la capital ecuatoriana, en el marco del paro nacional.
Miles de estudiantes, apoyados por otros grupos sociales, recorrieron las calles del centro histórico de Quito en una marcha pacífica en la que muchos jóvenes bailaron cerca del Palacio presidencial de Carondelet, fuertemente custodiado por policías.
Y mientras se escuchaban esporádicos gritos de “Fuera Lasso, fuera”, muchos criticaron la gestión económica del Ejecutivo, a la que acusan del gran incremento de los precios en los mercados de víveres.
También se han observado grupos de jóvenes artistas entonando melodías de protesta y hasta bailes improvisados con críticas a las autoridades, especialmente a los policías, a los que increparon por mostrarse fuertes en las protestas y débiles ante el auge de la delincuencia.
La Federación de Estudiantes Universitarios plegó a la convocatoria a la movilización nacional convocada por la Conaie.