Preocupa venta paralela ilegal de cannabis y sus derivados
de productos para fumadores y vapeadores, en donde en muchos casos merodean menores de edad. En algunos casos están cerca de escuelas públicas.
¡Vigilen a sus niños!
De hecho, hace unos días se abrió un procedimiento judicial por parte del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) contra cuatro establecimientos ubicados en los vecindarios de East sillage y Loisaida.
De forma muy clara, las demandas de la Uniformada alegan que oficiales fueron testigo de la venta de cannabis a menores de edad, en cuatro establecimientos del Bajo Manhattan, ubicados en la Calle 14, la Primera Avenida, Saint Marks Place y la Avenida A.
Ante este hallazgo, la oficina del fiscal de distrito de Manhattan envió cartas por correo a cada una de las más de 400 tiendas de humo registradas en este condado, advirtiéndoles sobre la posibilidad de procedimientos que podrían terminar en cierre de sus operaciones, por venta ilegal de productos con presencia de la hierba.
Pero este problema no es exclusivo de Manhattan. Obviamente, las autoridades están al tanto.
De hecho, medios locales reportaron que un niño de 11 años de Staten Island fue hospitalizado con un fuerte ataque, después de comer gomitas de TeC que confundió con dulces en una fiesta del Super Bowl. Ahora su madre insta al alcalde a hacer algo para evitar posibles tragedias que involucren estos comestibles.
Uno de los funcionarios que se ha mostrado más activo, tratando de enfrentar esta tendencia, es el alguacil de Nueva York, Antonio Miranda, quien reconoce que el tema de las venta desordenada de productos de cannabis fuera de los límites de la nueva ley significan un “problema serio”. Aunque asegura que ahora tiene nuevas herramientas para combatirlo frontalmente.
“eemos visto en nuestros recorridos estos productos como los cigarillos electrónicos y caramelos que contienen tetrahidrocannabinol (TeC). Son anunciados y son llamativos específicamente para la comunidad joven. Debemos insistir que digan lo que digan sus distribuidores, estas tiendas sin licencias, pueden tener productos dañinos. Es