Jeremy Lin sacó provecho de gira asiática
EI base de los Rockets, de gran popularidad entre los aficionados asiáticos, mostró un buen nivel en la gira de pretemporada
Jonathan Feigen
Si la Linsanity nos dejó alguna enseñanza es que Jeremy Lin puede elevar su nivel para estar a la altura de las circunstancias. Y ésta fue una ocasión muy especial.
Lin, descendiente de inmigrantes asiáticos en Estados Unidos, no ocultaba lo mucho que significaba para él que la NBA organizara esta gira de los Rockets por Asia, y especialmente el partido ante los Pacers en Taipei, donde aprovechó para sentir todo el cariño de parientes y aficionados.
Y Lin respondió ante la gran presión que el evento concentró en su figura.
“Salí y todo el mundo me estaba mirando”, dijo Lin. “Cuando salí a calentar antes del juego estaba muy nervioso, mucho más que en Filipinas”.
Los Rockets, que venían de ganar 116-96 en Filipinas, en el primer juego de la gira asiática frente al mismo rival, tenían un plan a seguir más allá de los nervios de su base estelar.
En su primera posesión de balón del segundo partido, el equipo de Houston buscó a Lin abierto para lanzar y éste respondió con un triple.
De ahí en más, el base sacó lo mejor de su repertorio, con más triples, penetraciones hacia la canasta, asistencias y robos que encaminaron a los Rockets hacia un nuevo triunfo, de 107-98, el segundo consecutivo contra el equipo de Indiana.
La confianza de Lin en su juego fue creciendo con el correr de los minutos mientras acertaba todo lo que intentaba, y, dijo, la multitud hizo el resto con un gran ambiente.
“Metes una clavada, metes una tapa y la gente entonces se entusiasma”, explicó Lin después de acumular 17 puntos, cuatro asistencias y tres robos. “Fue un poco de todo y yo no salía de mi asombro porque me salía todo bien”.
James Harden guió otra vez a los Rockets como el máximo anotador, con 21 puntos, mientras que el dominicano Francisco García, quien regresó al equipo tras recuperarse de una lesión en la ingle, colaboró con 15.
Pero la noche, sin embargo, perteneció a Lin, el gran centro de atención para la afición asiática.
“Jeremy jugó bien”, dijo que el entrenador de los Rockets, Kevin McHale. “Ha estado jugando muy bien la última semana, en 10 días que llevamos de partidos y prácticas. Creo que está muy cómodo con quién es. Ha bajado de peso y está más rápido. Jugó bien de nuevo esta noche, pero también ha estado jugando bien en las prácticas. Siempre es agradable cuando los chicos juegan bien en las prácticas y llevan ese nivel a los partidos”.
En menos de un minuto de juego, Lin ya había clavado un triple en su primer contacto con el balón, algo que provocó una explosión de alegría de un estadio repleto de aficionados que asistieron con el anhelo de ver a su hijo adoptivo favorito.
Cuando poco después clavó su segunda canasta de tres puntos terminó el primer cuarto con 10 unidades, con cuatro de cinco tiros al aro. Sólo estaba entrando en calor.
La alegría dio lugar a la locura cuando Lin persiguió a Danny Granger y en una gran jugada defensiva desvió el balón hacia las tribunas.
“No podía creer lo que estaba pasando (...), nunca había hecho una jugada así en un partido”, admitió Lin, quien se retiró feliz con su actuación.
jonathan.feigen@chron.com