‘En Otra Piel’, una historia de amor trágico y de intercambio de almas
Esta nueva telenovela, que Telemundo estrena el 18 de febrero, tiene a Laura Flores, María Elisa Camargo y David Chocarro como protagonistas
Mónica Serrano es una afamada pianista de música clásica que, luego de un concierto, casi atropella a la joven mesera Adriana Aguilar. Para aliviarle el susto, Serrano se ofrece a llevar a Aguilar a su casa. En el trayecto, la joven pierde un amuleto que siempre lleva consigo. Días después, Serrano encuentra el amuleto en el auto, se lo cuelga al cuello, y comienza a padecer extrañas visiones sobre la suerte de Aguilar.
El encuentro fortuito entre Serrano y Aguilar desencadena la trama trágica, de enredos, traiciones y heroísmos de la telenovela En Otra Piel (2014), que la cadena Telemundo estrena el martes 18 de febrero.
Los papeles protagónicos están en manos de la actriz ecuatoriana María Elisa Camargo (como Adriana Aguilar) y la mexicana Laura Flores (como Mónica Serrano).
“Este es el personaje, el reto, más complejo que he hecho en mi carrera”, dice con decisión Camargo, de 28 años, en una entrevista con La Voz sobre la que es su primera actuación protagónica.
Camargo, por exigencias de la transmutación de almas que marca el guión de la telenovela, además del papel de Adriana Aguilar también debe interpretear los rasgos de Mónica Serrano, quien se posesiona del cuerpo de Aguilar luego de que ésta muere.
“Como actriz se me complica mucho la interpretación... porque en este papel la idea es lograr, dentro de este parámetro paranormal que tiene la historia, que la gente crea que esto (el intercambio de almas) sí es posible”, detalla Camargo.
Serrano y Flores, junto con el resto de los actores protagónicos de la telenovela, pasaron por Houston durante una gélida mañana de febrero para una sesión de entrevistas con la prensa en español de Estados Unidos, acompañada de un collage en video de diversas escenas de la serie.
Completan el reparto estelar de En Otra Piel el actor argentino David Chocarro (como Diego Ochoa, el novio abnegado de Mónica Aguilar) y el cubano Jorge Luis Pila (como Gerardo Fonsi, el esposo malévolo e infiel de Mónica Serrano).
También actúan, en roles de malvados, la actriz mexicana Vanessa Villela (como Elena Serrano, la ambiciosa sobrina y representante de Mónica Serrano) y el gran actor mexicano Plutarco Haza (como el torvo y malévolo Carlos Ricalde, un proxeneta y tratante de mujeres obsesionado con Adriana Aguilar). Una metáfora
Haza considera que En Otra Piel tiene un subtexto “que es una metáfora sobre las segundas oportunidades en la vida, más allá del mero pretexto narrativo de lo sobrenatural”.
Y aclara: “La reencarnación a fin de cuentas es eso... La vida siempre nos ofrece segundas oportunidades, si sabemos estar atentos”.
La dirección de la nueva telenovela de Telemundo está en manos de los veteranos directores venezolanos de cine y televisión Luis Manzo y Ricardo Shwarz, cono- cidos en Estados Unidos por su trabajo conjunto en la telenovela Santa Diabla (2013), de la misma cadena.
Para Chocarro, la labor de Manzo y Schwarz ha sido clave para crear un ambiente altamente profesional en los foros.
“Son grandes directores... muy apasionados de su trabajo, y eso lo transmitieron a todo el equipo, no sólo a los actores”, dice el actor argentino. “Aunque apenas llevamos dos meses de grabaciones tenemos un diálogo constante sobre el perfil que ellos quieren para cada personaje”.
Un acierto de Manzo y Schwarz, explica por su parte Flores, una veterana actriz de las telenovelas mexicanas, es que prescindieron del uso del apuntador electrónico, un recurso muy usado en el género de las las telenovelas para dictarles a los actores el diálogo en cada escena. Muy cerca del teatro
El hacer que el actor se aprenda su texto y las réplicas de sus compañeros, explica Flores, le dio a la serie otro ritmo e intensidad comparado, dice, con lo que ella había hecho hasta ahora en televisión.
Así, abunda, las actuaciones en pantalla rozan el trabajo vertiginoso y casi matemático que se realiza en el teatro y se alejan del acartonado trabajo de una actuación para telenovela.
“Estoy muy contenta.... después de tantos años de trabajar con el chícharo (apuntador electrónico en la jerga actoral). Me siento liberada”, dice la actriz.
Flores, de 50 años, marca En Otra Piel su separación de la cadena mexicana Televisa y su regreso a las telenovelas tras dos años de ausencia, pero esta vez con Telemundo.
Para Flores, el gran conflicto que reside en su personaje de Mónica Serrano es la soledad que la hace tomar decisiones equivocadas al confiar demasiado en su esposo Gerardo Fonsi.
“Mónica Serrano es una mujer sola e insatisfecha a la que no la llena todo ese talento que tiene”, explica Flores y dice que por esa soledad se ciega y no logra darse cuenta de las infidelidades y abusos que comete su esposo, mucho más joven que ella.
“Es muy evidente el engaño que le hace su esposo. Se entrega (a él) por amor... pese a los abusos y por su terrible miedo a la soledad”, detalla Flores.
Paradójicamente, esta es la primera vez en los 30 años de carrera de Flores como actriz y también como cantante que ella interpreta a un músico.
En el resumen de escenas presentadas en la conferencia de prensa en Houston destaca la presencia de Haza como el malo de la historia. Su experiencia de más de 20 años como actor profesional en cine, teatro y televisión es notoria. Un hombre cruel
La amplitud de recursos en el uso del cuerpo, la voz y el control de las emociones del actor mexicano convierten a Carlos Ricalde en un personaje que seguramente causará odios y polémica.
Con una simple mirada, un gesto, o un cambio de postura, el actor transmite una lacerante maldad y una fría crueldad, recreando un villano sin pizca de escrúpulos.
“Es un perfecto antagonista hacia Adriana Aguilar en lo que él entiende como amor... que no es más que obsesión enfermiza”, explica Haza. A partir de que la quiere tener, dice, el personaje sacrifica incluso su aparentemente cómoda vida como criminal.